Debo admitir que tengo muy vagos recuerdos de mi viaje a Viena, por lo que revisar las fotografías y escribir este post me ha ayudado bastante a reconstruir mi paso por la capital austriaca allá por 2014.
Dicen los correos que hemos llegado a eso de las 2 de la tarde de un sábado en un bus procedente desde Budapest, y que nos hemos instalado en el Hotel Mercure Josefshof Wien Am Rathaus, muy cerca del ayuntamiento de la ciudad.
Así que después de un viaje de casi 3 horas, hemos dejado las cosas en el hotel y nos hemos ido directo a buscar un sitio donde almorzar.
LOS 20 LUGARES QUE NO TE DEBES PERDER
AYUNTAMIENTO DE VIENA
Fue así como caminamos unas cuadras y llegamos al Ayuntamiento de Viena, un imponente y precioso edificio construido entre 1872 y 1883 por Fiedrich von Schmidt, quien fuera el arquitecto de la catedral de Colonia, en Alemania.
Se trata del edificio de estilo neogótico más importante de Viena, que por cierto, sigue el estilo ostentoso y sofisticado de todo el resto de la ciudad, por lo que su visita, tanto de día como de noche, cuando se ilumina, es una de las cosas que tienes que hacer en tu paso por la capital austriaca.
El Ayuntamiento de Viena es la sede de la alcaldía y su torre alcanza los 97,9 metros, sobre la que se asienta la tradicional figura de hierro del Rathausmann, auténtico icono de la ciudad, de 3,4 metros de altura y con un estandarte de 6 metros.
Frente al bello edificio tienen lugar desde bailes hasta festivales de cine y eventos deportivos. A partir de noviembre, el mercado de Adviento genera un ambiente navideño, mientras de enero a marzo, la Rathausplatz y el Rathauspark se convierten en una fantástica pista de hielo.
Para fines de septiembre, nosotros nos encontramos con una carpa de circo y un entretenido mercado de comidas típicas, donde por nada más ni nada menos que 30 euros, comimos las tradicionales salchichas con papas y mostaza, junto con un vaso de cerveza. De todas maneras, el alto precio valió la pena, porque estaban exquisitas.
Sabías que en la construcción del Ayuntamiento se utilizaron unos 30 millones de ladrillos y más de 40.000 metros cúbicos de piedra natural.
Friedrich-Schmidt-Platz 1 / Metro: Rathaus (línea U2) / Tranvía: Rathaus (línea 2), Rathausplatz/Burgtheater (líneas 1, 71 y D)
Visitas guiadas: Lunes, miércoles y viernes a las 13:00 horas
Entrada gratuita
RINGSTRASSE
Con el estómago lleno, seguimos nuestro paseo hacia la Ringstrasse, la avenida más importante de la ciudad, en la que se encuentran los edificios más famosos de Viena, y que fue construida en el mismo lugar en el que se encontraba la antigua muralla.
Y es que desde el siglo XIII, Viena se encontraba protegida por una muralla, sin embargo, la ciudad fue creciendo hacia el exterior de los muros, por lo que en 1857 comenzó a derribarse la muralla y en su lugar se construyó este gran bulevar circular.
La mayoría de los edificios que se encuentran en esta avenida fueron levantados hacia 1870, destacando el Parlamento de Austria, el Ayuntamiento, la Iglesia Votiva, la Ópera de Viena, el Museo de Historia Natural, el Museo de Historia del Arte, la Bolsa, la Universidad y el Palacio Hofburg, entre otros.
Una buena forma de recorrer esta avenida circular es tomando el Ringtram, un tranvía que recorre toda la Ringstrasse, pasando por algunos de los puntos más emblemáticos de la capital de Austria. El recorrido dura unos 25 minutos, cuenta con un audioguía y cuesta 9 euros.
Sabías que la Ringstrasse está formada por diferentes tramos que incluyen la palabra ring (anillo) en sus nombres: Stubenring, Parkring, Schubertring, Kärntner Ring, Opernring, Burgring, Dr. Karl-Renner-Ring, Dr. Karl-Lueger-Ring y Schottenring.
IGLESIA VOTIVA DE VIENA
Ubicada sobre la Ringstrasse, llegamos a la majestuosa Iglesia Votiva de Viena, uno de los templos de estilo neogótico más importantes del mundo, cuya construcción si bien se inició en 1853 con motivo de dar gracias por la recuperación del emperador Francisco José tras un intento de asesinato, culminó en 1879 para la celebración de las bodas de plata de la pareja real.
Por fuera llaman la atención sus dos torres con forma de aguja, las que se alzan hasta los 99 metros, mientras que en su interior, en el altar de la Virgen de Guadalupe, construido en honor al emperador Maximiliano de México, hermano de Francisco José, destaca la llamada “Vela Bárbara” que, con sus 4 metros de altura, 3 de ancho y 264 kilos de peso, se dice que podría durar un siglo encendida.
Sabías que en el interior de la iglesia se conserva el sarcófago renacentista de Nikla Salm, comandante al mando de las tropas austriacas durante el asedio turco de 1529.
Rooseveltplatz, 8 / Metro: Schottentor (línea U2) / Tranvía: Schwarzspanierstraße y Schottentor (líneas 37, 38, 40, 41 y 42)
Martes a viernes: 16:00 a 18:00 horas / Sábado y domingo: 9:00 a 13:00 horas
Iglesia: entrada gratuita / Museo: 3,90 €
https://www.votivkirche.at/
PALACIO IMPERIAL DE HOFBURG
Luego, caminando hacia el sur por la avenida Herrengasse, llegamos al Palacio Imperial de Hofburg, lugar de residencia de los Habsburgo por más de 600 años.
El palacio que originalmente era un castillo del siglo XIII y luego se fue transformando hasta convertirse en una residencia lujosa, fue habitado hasta 1918 por la familia real. Se trata de un enorme conjunto arquitectónico que abarca desde los antiguos aposentos imperiales, pasando por varios museos, una capilla y una iglesia, hasta la Biblioteca Nacional Austriaca y la Escuela de Invierno de Equitación. En la actualidad, aquí vive el presidente de Austria y se realizan congresos y muestras de arte
La visita incluye la Platería de la Corte, donde se exponen lujosas cristalerías, objetos de plata y porcelana, utensilios de cocina y mantelerías procedentes de la cocina imperial; y los Apartamentos Imperiales (Kaiserappartements), donde se recorren 19 habitaciones en las que vivieron el emperador Francisco José y la emperatriz Elisabeth.
El tour concluye con un recorrido por las seis salas del Museo de Sisi, donde el audioguía va explicando la intensa vida de la emperatriz y va contando relatos sobre su rebeldía ante la vida en la corte, su obsesión por la belleza y la extrema delgadez y el estado de profunda melancolía en el que se encontraba sumida.
Sabías que mientras que el Palacio Schönbrunn es conocido por ser el lugar de veraneo preferido por los emperadores, el Palacio de Hofburg se destaca por ser la residencia de invierno.
Michaelerplatz, 1 / Metro: Herrengasse (línea U3) y Stephansplatz (líneas U1 y U3) / Tranvía: Burgring (líneas 1, 2 y D)
Septiembre a junio: 9:00 a 17:30 horas / Julio y agosto: 9:00 a 18:00 horas
Adultos: 15 € / Estudiantes de 19 a 25 años: 14 € / Niños de 6 a 18 años: 9 € (todas las entradas incluyen audioguía) / * Acceso gratuito con Vienna Pass
https://www.hofburg-wien.at/en/
BIBLIOTECA NACIONAL DE AUSTRIA
Junto al Palacio, visitamos la Biblioteca Nacional Austriaca, la biblioteca barroca más grande y una de las más bonitas del mundo, construida bajo el mandado del Emperador Carlos VI.
Erigida entre 1723 y 1726 como un ala del palacio imperial, con el fin de albergar la biblioteca de los Habsburgo, cuenta con casi ocho millones de ejemplares y es sede del Museo de los Papiros, que conserva más de 180.000 ejemplares; el Museo de Globos, cuya colección abarca 700 globos terráqueos, planetarios, lunares y celestes, y 295.000 mapas; y el Museo de Esperanto, fundado en 1972 y que alberga casi 100.000 ejemplares sobre la historia de esta lengua.
Sin embargo, uno de los lugares más impresionantes es la Sala Imperial, de 80 metros de largo y 20 de alto, rematada por una cúpula decorada con frescos de Daniel Gran, pintor de la corte, que representan la apoteosis de Carlos VI con figuras de dioses mitológicos y figuras alegóricas de las ciencias.
En sus estanterías de madera de castaño se conservan más de 200.000 libros, que incluyen 15.000 ejemplares de la biblioteca personal de Eugenio de Saboya, una importante colección de libros sobre la Reforma y otros libros religiosos procedentes de distintos monasterios.
Pero además, la sala está repleta de estatuas de mármol y pinturas que le imprimen un ambiente único, coronado por dos impactantes globos barrocos, uno terráqueo y otro celeste, de más de un metro de diámetro cada uno.
Josefsplatz, 1 / Metro: Herrengasse (línea U3) y Stephansplatz (líneas U1 y U3) / Tranvía: Kärntnerring Oper (líneas 1, 2, 71 y D)
Lunes a domingo: 10:00 a 18:00 horas (jueves hasta las 21:00 horas) / Lunes de octubre a mayo: cerrado
Adultos: 8 € / Estudiantes: 6 € / * Acceso gratuito con Vienna Pass
https://www.onb.ac.at/en/
Para terminar, caminamos por Mariahilfer Strasse, una de las principales calles comerciales de Viena, hasta la estación BahnhofCity Wien West, donde nos quedamos viendo los trenes salir hasta que cayó la noche.
ÓPERA ESTATAL DE VIENA
El segundo día partimos caminando nuevamente por la Ringstrasse hacia la Ópera Estatal de Viena, uno de los teatros de ópera más importantes del mundo.
Inaugurado en 1869 con la presentación de una obra de Mozart, este edificio de estilo renacentista fue una decepción para los vieneses que esperaban algo más de él. El arquitecto del edificio se quitó la vida, desolado ante la idea de que su obra no hubiera triunfado. El segundo arquitecto que fue contratado tampoco puedo aguantar la presión y murió de un infarto.
En 1945, durante la Segunda Guerra Mundial, una bomba lo destruyó casi por completo, por lo que debió ser reconstruido y reinaugurado diez años después, dotado de las tecnologías más avanzadas.
En la visita guiada se inicia en el hall de entrada para luego subir por la escalera principal de mármol y conocer el increíble auditorio con espacio para 2.800 espectadores. Pero también es posible conocer la Ópera comprando una de las entradas más baratas, las que cuestan entre 3 y 4 €. La única desventaja es que no disponen de asientos (hay que ver el espectáculo de pie) y no están disponibles para la venta anticipada, por lo que hay que hacer cola un par de horas antes de la obra para adquirirlas.
Sabías que la Ópera de Viena fue el primer edificio del proyecto de la Ringstrasse en ser finalizado.
Opernring, 2 / Metro: Karlsplatz (líneas U1 y U2) / Tranvía: Wien Oper (líneas 1, 2, 62 y D)
Visitas guiadas entre las 10:00 y las 15:00 horas, dependiendo el día.
Visita guiada + Museo de la Ópera: Adultos: 7,50 € / Tercera edad: 6 € / Estudiantes: 3,50 € / Museo de la Ópera (martes a domingo): Adulto: 3 € / Tercera edad: 2,50 € / Estudiantes: 2 €
https://www.wiener-staatsoper.at/en/
IGLESIA DE SAN CARLOS BORROMEO
Muy cerca de la Ópera nos encontramos con la Iglesia de San Carlos Borromeo, un particular templo de estilo barroco, del cual destacan sus dos columnas exteriores, inspiradas en la Columna de Trajano de Roma, con una decoración en espiral que representa escenas de la vida de San Carlos Borromeo.
Su origen data de 1713, cuando una peste azotó a la ciudad, cobrando la vida de unas 8 mil personas. Dada la magnitud de la epidemia, el emperador Carlos VI prometió a la población que cuando se liberaran de esta enfermedad, levantaría un templo en honor a San Carlos Borromeo, obra que culminó 25 años después.
En su interior destaca la cúpula en la que se puede ver un fresco pintado en 1725 por Johann Michael Rottmayr de Salzburgo conocido como “La apoteosis de San Carlos Borromeo”.
Karlsplatz / Metro: Karlsplatz (líneas U1 y U2) / Tranvía: Gußhausstraße (línea D) y Wien Resselgasse (líneas 1 y 62)
Lunes a sábado: 9:00 a 18:00 horas / Domingos y festivos: 12:00 a 19:00 horas
Adultos: 8 € / Estudiantes: 4 € / Menores de 10 años: entrada gratuita
http://www.karlskirche.at/
A un par de cuadras de la iglesia, visitamos el Monumento a los Héroes del Ejército Rojo, construido en 1945 para rendir homenaje a los 17 mil soldados muertos durante la Batalla de Viena, en la Segunda Guerra Mundial.
STADTPARK
Ya cerca del mediodía llegamos al Stadtpark o Parque de la Ciudad, uno de los parques más antiguos de Viena, abierto en 1862, tras la demolición de lo que quedaba de las murallas de la ciudad.
De estilo inglés, el parque tiene una extensión de 65.000 metros cuadrados, lo que lo convierte en uno de los más grandes de la ciudad y en uno de los preferidos por los vieneses y turistas.
El río Wien divide el parque en dos, el que es atravesado por algunos pequeños puentes que unen ambas partes. Pero el Stadtpark es también el parque con más esculturas y monumentos, siendo la estatua más famosa la de Johann Strauss, creada en 1921 para rendirle homenaje a este importante compositor austriaco.
Aquí también vimos el Kursalon, un pabellón de estilo neo renacentista construido en 1867, cuya función original fue servir como centro hidroterapéutico, pero que a partir de 1868, fue utilizado como sala de conciertos.
Landstraße, 1030 / Metro: Stadtpark (línea U4) y Stubentor (línea U3) / Tranvía: Weihburggasse (línea 2)
Abierto las 24 horas
Entrada gratuita
CASA DE MOZART
En camino hacia la Catedral de San Esteban, nos encontramos con la Casa de Mozart, un apartamento en la calle Domgasse en el que el reputado compositor vivió junto con su familia entre los años 1784 y 1787.
En recorrido por el edificio incluye sus cuatro pisos, comenzando en la tercera planta, en la que se conocen datos interesantes sobre los años que pasó Mozart en Viena, los lugares en los que actuaba, quiénes eran sus amigos, su relación con los masones o la gran pasión que tenía por los juegos.
En el segundo piso se presentan los trabajos de Mozart como compositor de óperas, mientras que en el primero se puede ver cómo era el hogar del artista. En el sótano existe un centro de aprendizaje en el que los interesados pueden aprender lo que deseen sobre el maestro.
Sabías que de la docena de casas en las que vivió Wolfgang Amadeus Mozart, la ubicada en la calle Domgasse 5 es la única que aún se conserva.
Domgasse, 5 / Metro: Stephansplatz (línea U1) y Stubentor (línea U3) / Tranvía: Stubentor (línea 2)
Lunes a domingo: 10:00 a 18:00 horas
Entrada general: 11 € / Estudiantes y mayores de 65 años: 9 € / Menores de 19 años: 4,50 € / Entrada gratuita el primer domingo de mes / * Acceso gratuito con Vienna Pass
https://www.wienmuseum.at/en/locations/mozartwohnung
CATEDRAL DE SAN ESTEBAN
Situada en pleno corazón de la capital austriaca, está la Catedral de San Esteban, sede principal de la archidiócesis de Viena y el símbolo religioso más importante de la ciudad.
Esta imponente y maravillosa construcción fue edificada sobre las ruinas de una iglesia románica dedicada a San Esteban en 1147, aunque del antiguo templo sólo se conservan la Puerta de los Gigantes (que lleva ese nombre debido al fémur de mastodonte que colgaba sobre ella) y las Torres de los Paganos.
La catedral está coronada por una gran torre de estilo gótico con forma de aguja, que con sus 137 metros de altura, es visible desde diferentes puntos de Viena y constituye además, un espectacular mirador al cual se accede en forma de escalera de caracol y desde el que se obtienen unas preciosas vistas del centro de la ciudad.
En la parte posterior de la catedral se puede ver el Tejado de los Azulejos, formado por más de 250 mil azulejos que tuvieron que ser restaurados tras quedar seriamente dañados durante la II Guerra Mundial.
En su interior, en tanto, se observan distintos estilos arquitectónicos, como el gótico de la nave central y el barroco de algunos edificios laterales. No obstante, su gran particularidad es la de contar con bóvedas en donde descansan los restos de gran parte de los miembros de la familia Habsburgo, además de haber sido el lugar donde se realizó la boda y el funeral de Mozart.
Sabías que en la parte derecha de la catedral hay una entrada llamada la Puerta de los Cantores, que no podía ser utilizada por las mujeres.
Descubre los lugares más importantes de Viena con esta fantástica visita guiada en español.
Stephansplatz, 3 / Metro: Stephansplatz (líneas U1 y U3)
Lunes a sábado: 6:00 a 22:00 horas / Domingos y festivos: 7:00 a 22:00 horas
Catedral: entrada gratuita / Catacumbas: Adultos: 5,50 € / Niños entre 14 y 18 años: 3 € / Niños entre 6 y 14 años: 2 € / Torre Sur: Adultos: 4,50 € / Niños entre 14 y 18 años: 2 € / Niños entre 6 y 14 años: 1,50 € / Campana Pummerin (Torre Norte): Adultos: 5,50 € / Niños de 6 a 14 años: 2 €
https://www.stephanskirche.at/
KÄRNTNER STRASSE
Tras visitar la Catedral, desde la Stephansplatz caminamos hacia el sur por la Kärntner Strasse, principal arteria del centro de Viena y que es, también, una de las calles comerciales más largas y lujosas de toda Europa.
Entre las innumerables tiendas de souvenirs y cafés repletos de millones de turistas que visitan la ciudad, merece la pena echar un vistazo a los grandes almacenes Steffl con su fabuloso ascensor panorámico y al American Bar, fundado por Adolf Loos en 1908.
CAFÉ SACHER
Para almorzar decidimos hacer algo distinto, por lo que fuimos al célebre Café Sacher, situado frente a la Ópera de Viena y que abrió sus puertas en 1876, convirtiéndose en el lugar de reunión de los famosos.
Aquí, aunque una de las especialidades es el tafelspitz (ternera cocida) mezclado con salsa de manzana y rábano picante, como fanático de los dulces, probé la famosa tarta Sacher, un pastel que fue creado en 1832 por Franz Sacher, quien trabajaba como pastelero del príncipe de Metternich, especialmente para un congreso que iba a realizarse en la ciudad.
Una maravilla por la que si quieres disfrutar, debes pagar en torno a 14 euros por un café y un trozo de tarta.
Sabías que la tarta Sacher consiste en dos capas de bizcocho de chocolate con una fina capa de mermelada de albaricoque entre ellos, cubiertas con una gruesa capa de ganache de chocolate. Tradicionalmente se sirve junto con una cucharada de crema batida.
Philarmonikerstrasse, 4 / Metro: Karlsplatz (líneas U1, U2 y U4) / Tranvía: Opernring (líneas 1, 2, D y J)
Lunes a domingo: 8:00 a 24:00 horas
https://www.sacher.com/en/restaurants/cafe-sacher-wien/
HUNDERTWASSERHAUS
Después fuimos a la Hundertwasserhaus, un original complejo residencial construido entre 1983 y 1986. La obra, del artista Friedensreich Hundertwasser, parece un colorido puzzle, con suelos que son ondulados y con árboles en el interior de las habitaciones que asoman por las ventanas.
Un edificio de formas fantasiosas que se ha convertido en una de las principales atracciones de Viena. Junto a a la Hundertwasserhaus se ubica “Hundertwasser Village”, un centro comercial construido bajo el mismo estilo, así como también el Museo Hundertwasser, en el que se exponen las obras del artista.
PARQUE PRATER
Para pasar la tarde, tomamos el metro hasta el Parque Prater, una de las áreas verdes más grandes de Viena, que funcionó como coto imperial de caza hasta 1766, cuando fue abierto al público.
Sin embargo, el principal atractivo es el parque de atracciones inaugurado en 1895, del cual se conservan varias de sus atracciones, siendo la vedette la Noria Gigante de Viena. Este emblema de la ciudad, de 60 metros de altura, data de 1897 y fue inaugurada para la celebración del 50º aniversario de la coronación de Francisco José I.
A lo largo de su historia, la noria sobrevivió a la Primera Guerra Mundial, cuando tuvo que dejar de funcionar durante dos años. Pero lamentablemente, en 1945, durante los últimos días de la Segunda Guerra Mundial, los bombardeos y el fuego destruyeron gran parte de la rueda. Y aunque fue reconstruida en tiempo récord, sólo pudieron ser colocadas 15 de las 30 cabinas que tenía inicialmente.
Pero aparte de la noria, a la que nos subimos para lograr unas preciosas fotos panorámicas de la ciudad, el Prater cuenta con más de 250 atracciones, que van desde juegos para los más niños hasta las más modernas montañas rusas.
Así que como fanático de los parques de atracciones, me animé con el “Black Mamba”, un columpio en forma de serpiente que hace girar a los pasajeros por el aire a una velocidad de 80 km/h; y el “Tornado”, que da vueltas a una altura de 24 metros.
Aunque debo reconocer que la que me dio más julepe fue la “Prater Tower”, unas sillitas voladoras que se elevan hasta los 117 metros. El problema es que al lado me tocó un hombre gordo, por lo que mientras subíamos no podía dejar de mirar las delgadas cadenas que sujetan los columpios con la sensación de que en cualquier momento se podían cortar, jajaja.
A todo esto, el Prater cuenta además, con equipamientos para hacer deporte, como zonas para patinar, jugar a la pelota y andar en bicicleta, como también con un antiguo pabellón para perros, conocido como Lusthaus, que fue construido en 1782 y se ha convertido en sede de importantes banquetes.
Sabías que las cabinas de la noria que no pudieron ser colgadas nuevamente, están colocadas debajo de ella a modo de una exposición en las que se puede viajar por diferentes épocas del pasado de Viena.
Prater 9, Wiener Praterverband / Metro: Praterstern (líneas U1 y U2) / Tranvía: Praterstern (líneas 5 y O)
Lunes a domingo: 10:00 a 24:00 horas
Entrada gratuita al parque, se paga entre 1 y 5 € por atracción / * Acceso gratuito a la noria y otras atracciones con Vienna Pass
https://www.praterwien.com/en/home/
CAFÉ CENTRAL
Terminando el día, fuimos al Café Central para probar el típico café vienés, un expreso acompañado de una capa superficial de nata. Y es que Viena es una ciudad en la que el café forma parte de la cultura e incluso de la personalidad de todos sus habitantes.
Situado en la planta baja del Palais Fertsel, palacio de estilo neorrenacentista, ha sido punto de reunión de la sociedad vienesa desde que abrió sus puertas en 1876. Políticos e intelectuales se daban cita aquí, si hasta Freud era un cliente frecuente del Central.
Más adelante, fue visitado por algunas de las figuras históricas más importantes del siglo XX, tales como Stalin, Hitler, Tito y Trotsky, quienes vivieron en Viena entre las dos guerras mundiales.
Herrengasse, 14 / Metro: Herregasse (línea U3) y Schottentor (línea U2)
Lunes a sábado: 7:30 a 22:00 horas / Domingo: 10:00 a 22:00 horas
https://www.cafecentral.wien/en/
PARLAMENTO DE AUSTRIA
Comenzando nuestro último día en Viena, muy cerca del hotel, pasamos por el Parlamento de Austria, un edificio renacentista con estilo griego, cuya construcción comenzó en 1874, como parte del proyecto de renovación de la Ringstrasse, y finalizó diez años después.
Diseñado con la intención de recordar a la antigua Grecia como cuna de la democracia, el Parlamento está compuesto por dos grandes salas: la sede del Consejo Nacional (Nationalrat) y la del Consejo Federal (Bundesrat), las que se encuentran unidas por un pórtico central.
Si quieres conocer su interior, puedes hacerlo mediante una de las visitas guiadas, que se realizan en diferentes idiomas y en las que podrás ver el Salón de los Pilares, conformado por 24 pilares corintios, y la Cámara de la Asamblea Federal.
Sabías que a pesar de que durante la Segunda Guerra Mundial la mitad del Parlamento quedó destruido, hasta 1956 se realizaron obras de reconstrucción que dieron al edificio un aspecto similar al original.
Dr Karl Renner Ring, 3 / Metro: Volkstheater (líneas U2 y U3) / Tranvía: Stadiongasse/Parlament (líneas 1, 2 y D) y Dr. Karl Renner Ring (líneas 46 y 49)
Mediados de septiembre a mediados de julio (visitas guiadas en inglés y alemán): Lunes a jueves: 11:00, 14:00, 15:00 y 16:00 horas / Viernes: 11:00, 13:00, 14:00, 15:00 y 16:00 horas / Sábado: 11:00, 12:00, 13:00, 14:00, 15:00 y 16:00 horas / Mediados de julio a mediados de septiembre (visitas guiadas en español, inglés, francés, italiano y alemán): Lunes a sábado: 11:00, 12:00, 13:00, 14:00, 15:00 y 16:00 horas
Adultos: 5 € / Estudiantes hasta 25 años y tercera edad: 2,50 € / Menores de 6 años: entrada gratuita
https://www.parlament.gv.at/ENGL/GEBF/
NASCHMARKT
Luego nos dirigimos al Naschmarkt, el mercado callejero más conocido y popular de Viena, que se celebra desde el siglo XVI y en el que es posible encontrar flores, carne, pan y todo tipo de alimentos.
El mercado se extiende por más de un kilómetro y sus puestos se alinean en tres hileras, una de las cuales está dedicada a puestos de comida, especialmente de Asia y Medio Oriente. Aunque también hay varios restoranes donde sirven comida típica austríaca, como salchichas y “schnitzel”. Un sitio ideal para tomar desayuno.
Sabías que el Naschmarkt originalmente era un mercado de venta de leche y otros productos lácteos, tiempo en el que se llamaba Aschenmarkt, ya que a las botellas de leche se les decía “asch”.
Entre Karlsplatz y Kettenbrückengasse / Metro: Kettenbrückengasse (línea U4) y Karlsplatz (líneas U1 y U2)
Lunes a viernes: 6:00 a 18:30 horas / Sábado: 6:00 a 14:00 horas
PALACIO SCHÖNBRUNN
Tomando el metro llegamos al Palacio Schönbrunn, que fue durante años la residencia de verano de la familia imperial de Viena.
Construido en el siglo XVII, el Palacio Schönbrunn tiene 40 habitaciones decoradas en estilo rococó, que testimonian el estilo de vida de la época imperial. Pero además, cuenta con otros llamativos salones como la Gran Galería, utilizada para celebrar los banquetes imperiales; el Salón Chino Circular, donde María Teresa mantenía conversaciones privadas; el Salón del Desayuno y el Salón Chino Azul, que vio abdicar a Carlos I en el 1918.
Nosotros preferimos recorrer sus preciosos jardines, que se extienden hasta la Glorieta, que corona una colina desde la que se obtienen preciosas vistas del palacio y de la ciudad.
Sabías que junto al Palacio, se sitúa el Museo de Carruajes Imperiales, además del Tiergarten, el zoológico más antiguo del mundo.
Schönbrunner Schlossstrasse, 47 / Metro: Schönbrunn (línea U4) / Tranvía: Schönbrunn (líneas 10 y 58)
Abril a junio: 8:30 a 17:30 horas / Julio y agosto: 8:30 a 18:30 horas / Septiembre y octubre: 8:30 a 17:30 horas / Noviembre a marzo: 8:30 a 17:00 horas
Grand Tour: Adultos: 22 € / Niños de 6 a 18 años: 15 € / Imperial Tour: Adultos: 18 € / Niños de 6 a 18 años: 13 € / Laberinto: Adultos: 6 € / Niños de 6 a 18 años: 3,50 € / Mayores de 60 años: 4,50 € / Glorieta: Adultos: 4,50 € / Niños de 6 a 18 años: 3,20 € / Mayores de 60 años: 3,50 € / * Acceso gratuito con Vienna Pass
https://www.schoenbrunn.at/en/
PALACIO BELVEDERE
Para terminar nuestra estadía en Viena, fuimos rumbo hasta otro palacio, el Palacio Belvedere, construido en el siglo XV como residencia de verano del Príncipe Eugenio de Saboya y que en la actualidad, alberga un museo de arte.
En realidad, el conjunto del Palacio Belvedere lo conforman dos palacios unidos mediante un precioso jardín francés. En el punto más alto del jardín se sitúa el Belvedere Superior, donde se expone la galería austríaca de los siglos XIX y XX, en la que destacan las obras de Gustav Klimt con los retratos “El beso” y “Judit”. Junto con la increíble colección de pinturas, llama la atención el espacio conformado por la Sala Terrena, la capilla y el Salón de Mármol, únicos espacios decorados como un palacio.
Mientras tanto, el Belvedere Inferior cuenta con una fachada menos llamativa y en él se encuentran las exposiciones de arte barroco austriaco, donde se exhiben las obras de los artistas de la Edad de Oro de Viena. Algunas de las salas más importantes son la Sala de los Grotescos, la Galería de Mármol y el Salón de los Espejos, todas dotadas de un diseño barroco.
Belvedere Superior: Prinz-Eugen-Strasse, 27 / Belvedere Inferior: Renweg 6 / Metro: Südtiroler Platz o Taubstummengasse (línea U1) y Karlsplatz (líneas U1, U2 y U4) / Tranvía: Schloss Belvedere (línea D) y Unteres Belvedere (línea 71)
Belvedere Superior: Lunes a domingo: 10:00 a 18:00 horas / Belvedere Inferior: Lunes a domingo: 10:00 a 18:00 horas (miércoles hasta las 22:00 horas) / Establos de palacio: Lunes a domingo: 10:00 a 12:00 horas
Adultos: 22 € (Belvedere Superior e Inferior, y Orangerie) / Estudiantes y mayores de 65 años: 19 € / Menores de 18 años: entrada gratuita / * Acceso gratuito con Vienna Pass
https://www.belvedere.at/en
MUSEUMSQUARTIER
Para finalizar este post, aunque yo no fui, les recomiendo darse una vuelta por el Museumsquartier o Barrio de los Museos, uno de los complejos culturales más grandes del mundo, situado en lo que fueron antiguamente las caballerizas imperiales.
En sus más de 60.000 m2 de instalaciones concentra museos de arte como el Leopold Museum, el Mumok (Museum Moderner Kunst Stiftung Ludwig Wien, Museo de Arte Moderno de la Fundación Ludwig de Viena) y espacios de exhibición temporal de arte contemporáneo como el Kunsthalle Wien.
Y es que en el Museumsquartier podemos encontrar los géneros artísticos más diversos, además de restoranes, cafés y tiendas, situadas en edificios barrocos que se han mezclado con arquitectura moderna. Aquí se celebran también eventos de la talla del Wiener Festwochen (Festival Cultural de Viena) y el Festival Internacional de Cine de Viena.
Sabías que la construcción del Museumsquarter comenzó en 1998, para ser inaugurado en junio de 2001, con un costo final que ascendió a los 150 millones de euros.
Museumsplatz, 1 / Metro: Museumsquartier (línea U2) / Tranvía: Volkstheater U (línea 49)
https://www.mqw.at/
MAPA
CLIMA
Situada a orillas del río Danubio, a una altura de unos 200 metros, Viena presenta un clima de tipo continental, caracterizado por un invierno largo y duro, con frecuentes nevadas y días de frío muy intenso, acentuado por un viento moderado del oeste. Por su parte, el verano es cálido, con lluvias frecuentes, a menudo en forma de tormentas eléctricas.
Las lluvias se observan durante todo el año, aunque la época más lluviosa es al final de la primavera y principios del verano. El invierno es la época más seca del año. La nieve suele caer entre noviembre y marzo, mientras que desde diciembre a febrero la nieve es más frecuente.
En cuanto a la temperatura, durante enero, el mes más frío, las temperaturas medias oscilan entre -1 y 3°C, mientras que en julio, el mes más caluroso, varían entre los 17º y 26°C.
Por eso, mi consejo es visitarla durante la primavera y el otoño, épocas intermedias en las que no hay tanta afluencia de turistas y los precios de los alojamientos son algo más asequibles que en los meses de verano.
¿CUÁNTOS DÍAS ESTAR?
Creo que Viena merece al menos 3 días para visitar sus lugares emblemáticos, aunque siempre se puede aumentar un par de días para descubrir cada rincón de esta hermosa ciudad.
Comienza el primer día a primera hora visitando el mercado Naschmarkt para luego ir rumbo al Palacio Imperial de Hofburg, cuyo complejo incluye la Escuela Española de Equitación y la Biblioteca Nacional de Austria, una de las más bonitas del mundo. Cerca del Palacio, visita la Ópera Estatal de Viena y la Catedral de San Esteban. Por la tarde descansa en el Stadtpark y recorre la Ringstrasse, para terminar la jornada con un chocolate caliente en el Café Central.
El segundo día parte visitando el Palacio Schönbrunn, para después ir hasta el Prater, donde puedes aprovechar de almorzar. En la tarde, conoce la Hundertwasserhaus y el Palacio Belvedere.
El último día visita los museos del Museumquartier, la Iglesia Votiva y la de San Carlos Borromeo, y despídete de Viena con un exquisito trozo de la tradicional tarta Sacher en el Café Sacher.
ALOJAMIENTO
Viena es una ciudad plagada de galerías de arte y museos, con un rico patrimonio histórico, artístico y musical, que la convierten en una de las capitales europeas preferidas por los turistas. Sin embargo, pese a que cuenta una amplia oferta de alojamiento, no se caracteriza por ser un destino barato, aunque tampoco es de las ciudades más caras de Europa.
Una gran ventaja es la enorme variedad de tipos de alojamiento, que van desde albergues juveniles hasta opciones muy lujosas y con mucha tradición, como el famoso Hotel Sacher.
Innere Stadt: Corresponde al casco antiguo de la ciudad, el que se encuentra rodeado por la Ringstrasse. Es la zona más cara donde dormir en Viena, aunque también la más cómoda. Hay una gran oferta de hoteles y apartamentos cerca de atractivos como la Ópera de Viena, Stephansplatz o el Palacio de Hofburg. En esta zona se encuentra el Hotel Sacher, el más famoso de la ciudad gracias a su tarta de chocolate.
Wieden: Es el cuarto distrito de la ciudad y una de las mejores zonas donde dormir en Viena si buscas un alojamiento por menos de 70€ la noche. Está ubicado muy cerca del Palacio de Belvedere y a unos 20 minutos a pie del centro de Viena. Además, está muy cerca de Wien Hauptbanhof, la estación central de trenes, lo que la convierte en una zona ideal para hacer excursiones desde Viena.
Leopoldstadt: Situada al este del centro de la ciudad, es una buena zona donde dormir ya que solo hay que cruzar el Danubio para entrar en el centro. El precio de los hoteles es parecido a los de Wieden y se tarda unos 20 minutos andando hasta Stephansplatz. Otra ventaja es que está al lado de Prater.
Neubau: Ubicada al oeste de la ciudad, cerca del Museumsquartier (zona de los museos), es una zona tranquila con una gran actividad comercial a solo dos kilómetros del centro de Viena. Los hoteles también son más económicos que en pleno centro y hay mucho ambiente, ya que es la zona con la población más joven, liberal y cosmopolita de la ciudad.
Favoriten: Es una zona residencial con muchas áreas verdes ubicada al sur de la ciudad, con hoteles muy buenos y económicos. Está a unos 40 minutos caminando del centro de Viena y unos 15 minutos en transporte público.
TRANSPORTE
El transporte público de Viena funciona de forma bastante eficiente y ofrece numerosas opciones para trasladarse, como metro, tranvías, autobuses, alquiler de coches y taxis.
METRO
El metro de Viena (U-Bahn) comenzó a construirse en el año 1969 y actualmente, se compone de 5 líneas:
Línea U1 (Roja): Línea U1 (Roja): Recorre Viena de norte a sur, desde la estación Leopoldau hasta llegar a Reumannplatz, con una estación junto a la Catedral y también sirve para llegar hasta el Prater.
Línea U2 (Violeta): Recorre el centro de la ciudad formando una especie de semicírculo que conecta la estación Stadion con la de Karlsplatz, pasando por el Prater, el Ayuntamiento, el Barrio de los Museos y la Iglesia de San Carlos Borromeo.
Línea U3 (Naranja): Cruza la ciudad de sureste a noroeste, desde la estación de Ottakring hasta la de Simmering, pasando por algunos lugares turísticos como Stephansplatz, el Museo Sisi y los Apartamentos Imperiales.
Línea U4 (Verde): Va desde Hütteldorf hasta Heiligenstadt, con una parada en el Palacio Schönbrunn.
Línea U6 (Marrón): Es la línea más larga y va desde la estación Siebenhirten hasta Florisdorf.
El horario de funcionamiento es aproximadamente de 5:00 a 00:30 horas y la frecuencia de los trenes suele ser de 5 minutos, aunque durante las horas ésta aumenta y los trenes tardan de 2 a 4 minutos, mientras que a partir de las 20:30 horas, pasan cada 7 u 8 minutos.
TRANVÍA
La red de tranvías de Viena está considerada una de las más extensas del mundo y cuenta con más de 30 líneas, siendo las más importantes desde el punto de vista turístico, las líneas 1 y 2, ya que realizan un recorrido alrededor de la Ringstrasse, realizando paradas en la Ópera, el Palacio Hofburg, el Parlamento y la Bolsa.
El horario de los tranvías depende de cada línea, aunque por lo general, comienzan a operar a las 5:00 y terminan a la medianoche. De todas formas, es aconsejable consultarlo con antelación, ya que algunas líneas sólo funcionan hasta las 21:00 horas o cambian sus horarios los fines de semana y festivos.
Vienna Ring Tram: Es un tranvía turístico que recorre la Ringstrasse realizando un total de 13 paradas, mientras ofrece información en varios idiomas acerca de los lugares que circula. Funciona todos los días de 10:00 a 18:00 horas con intervalos de 30 minutos. En julio y agosto hasta las 19:00 horas. El precio es de 12 € para los adultos y de 6 € para los niños de 6 a 15 años.
AUTOBUSES
Los autobuses en Viena tienen menos frecuencia y extensión que el metro y el tranvía, pero resultan de gran utilidad para realizar viajes nocturnos, ya que son el único medio de transporte que funciona por la noche.
Esta opción, conocida también como NightLine, opera desde las 00:30 hasta las 5:00 horas, con una frecuencia de 30 minutos. Su ventaja es la de acercar los puntos principales de la ciudad de manera más económica que un taxi. Eso sí debes tener en cuenta que el billete es más caro al comprárselo directamente al conductor.
TAXIS
Aunque los taxis nunca son la opción más barata, de vez en cuando son necesarios, como cuando nos trasladamos con maletas. Por ejemplo, un viaje desde el aeropuerto hasta el centro cuesta de 45 a 55 €.
Los taxis de Viena disponen de taxímetros y un trayecto por zonas céntricas de la ciudad suele tener un precio de entre 5 y 10 €. Los viajes realizados entre las 23:00 y las 6:00 horas tienen tarifas aún más elevadas. Asimismo, los precios son más caros cuando viaja más de un pasajero o si se transporta equipaje.
Ten en cuenta que en Viena los taxis no se detienen al llamarlos en la calle, sino que se pueden encontrar en las paradas de taxi (Taxistandplätze). Otra opción es llamar por teléfono para pedir uno, pero de esta forma tendrás que pagar un recargo.
BILLETES Y ABONOS
Los billetes de transporte son válidos para toda la red de transporte de Viena, lo que contempla metro, tranvías y autobuses. Un billete sirve hasta el final del trayecto e incluye transbordos y combinación entre un medio y otro.
El precio de un billete sencillo es de 2,40 € y deben ser validados en las estaciones de metro o al subir en el autobús o tranvía.
En tanto, los abonos permiten utilizar el transporte público de forma ilimitada durante su periodo de validez. Existen abono de 24 horas: 8 €, de 48 horas: 14,10 €, de 72 horas: 17,10 €, y un abono semanal: 16,20 €.
Los billetes se pueden adquirir en las boleterías o en las máquinas de las estaciones de metro. Los conductores de autobús y tranvía también venden billetes sencillos pero al comprar los billetes de esta forma, el precio de éstos aumenta un poco.
CONSEJOS
- Si vas a estar dos o tres días en Viena, es muy conveniente comprar la Vienna Card, que te da entrada con descuento en las principales atracciones, además de viajes gratis ilimitados en el transporte público.
- El centro histórico de Viena se puede recorrer perfectamente a pie o en bicicleta. Puedes alquilar una bici en más de 100 centros de alquiler de la ciudad a muy bajo precio.
- Si estás en Viena un fin de semana, recuerda que las tiendas están cerradas los domingos, incluyendo los supermercados. El resto de los días cierran a las 6 o 7 de la tarde. El horario habitual de los restoranes, en tanto, es de 11:00 a 14:00 y de 18:00 a 22:00 horas.
- La mayoría de los museos cierra a las 5 de la tarde, aunque los más importantes extienden su horario hasta las 8 de la noche un día a la semana.
- En los taxis es común dejar un 10% de la tarifa en propina, aunque no es obligatorio. La mayoría de los taxis no aceptan tarjetas de crédito y se les puede pedir la factura.
