Era nuestro primer viaje a Europa y la primera ciudad que visitaríamos después de una breve escala en Barajas para tomar un vuelo de EasyJet al aeropuerto de Luton, el aeródromo de las líneas aéreas de bajo costo de Londres.
El avión llegó a eso de las 12:40, así que entre los trámites de migración y buscar dónde debíamos tomar el tren hacia el centro, la hora avanzó y recién como a las 4 de la tarde pudimos instalarnos en el Shakespeare Hotel, muy cerca de la estación de trenes de Paddington.
Bastante cansados desde nuestro largo viaje desde Chile, nos tendimos un par de horas y cuando caía la noche, nos animamos a salir a conocer la ciudad.
LOS 27 LUGARES QUE NO TE DEBES PERDER
PICCADILLY CIRCUS
Así que lo primero fue tomar el “Tube” hasta Piccadilly Circus, una plaza mundialmente conocida por sus carteles luminosos y que se ha convertido en uno de los iconos de Londres.
Y es que nada más salir del metro nos dimos cuenta porqué Piccadilly Circus es el lugar elegido por muchos londinenses y turistas como punto de encuentro gracias a su ubicación en el centro del West End, donde confluyen varias calles importantes, como Regent Street y Piccadilly.
Pero además, Piccadilly Circus es sinónimo de ocio y diversión. Repleta de gente a cualquier hora del día, es especialmente bonito visitarla de noche, cuando las enormes pantallas LED y las luces de neón hacen brillar la zona convirtiéndola en ese lugar que muchas veces hemos visto en la televisión o en películas y que te deja con la boca abierta de emoción. Por eso, es el lugar ideal para ver cómo palpita la ciudad.
Piccadilly Circus fue proyectada por John Nash en 1819, como parte del plan de urbanización de Jorge IV, para unir su residencia, Carlton House, con Regent Park. Con la apertura de Shaftesbury Road, en 1885, pasó a ser una zona de gran tránsito de vehículos y peatones, por lo que muchas empresas comenzaron a poner allí sus anuncios. Los primeros carteles iluminados aparecieron en 1895.
Desde Piccadilly Circus caminamos hacia el norte por Regent Street, una avenida que separa el ruidoso Soho de Mayfair, otro barrio habitado por la alta sociedad. Originariamente diseñada por John Nash para convertirse en el centro neurálgico de esta parte de la ciudad, aquí encontramos elegantes boutiques, algunas de las cuales datan de principios del siglo XX.
Sabías que en 1893 se añadió la estatua del Ángel de la Caridad Cristiana, conocida como Eros, que conmemora a Anthony Ashley Cooper, el séptimo conde de Shaftesbury que luchó por mejorar las condiciones de los obreros.
CHINATOWN
Por aquí mismo aprovechamos de caminar por Chinatown, el barrio chino de Londres, ubicado en Soho, una de las zonas comerciales más movidas y visitadas de la ciudad, y donde aprovechamos de comer en uno de los tantos restoranes del área, por unas 10 libras cada uno.
Pero el primer Chinatown estaba ubicado en el East End. Nació del asentamiento de marinos chinos que dejaron los barcos para vivir en Limehouse, en el siglo XVIII y que instalaron allí sus pequeños negocios. En la Primera Guerra Mundial, Limehouse quedó casi destruido y los inmigrantes quedaron sin casa y sin trabajo.
Sin embargo, la historia tuvo un giro inesperado, cuando muchos soldados británicos que habían estado en países asiáticos comenzaron a asistir con frecuencia a los restoranes chinos que sobrevivieron y que entonces, se ubicaban en Gerrard Street, en el West End. Así surgió la actual Chinatown.
Fue hacia los 60 cuando Chinatown se convirtió en la zona por excelencia de la comunidad china, con la llegada de miles de trabajadores provenientes de Hong Kong. El sitio adquirió una identidad definida con la construcción de las Puertas y el Pabellón, y claro, la fama de su cocina china hizo el resto.
BIG BEN
Al día siguiente, después de desayunar bien temprano en el hotel, partimos a tomar el Underground hacia la estación Westminster, donde apenas salir, nos topamos con el Big Ben, sin lugar a dudas, una de las imágenes más famosas de Londres y uno de sus principales símbolos.
Curiosamente el nombre de Big Ben no se refiere a la torre ni al reloj, sino que a la gigantesca campana de más de 13.800 kilos que se encuentra en su interior. Aunque no está claro por qué se la llamó de este modo, hay dos teorías: la primera, dice que se la bautizó así en honor a Sir Benjamin Hall, quien supervisó la construcción de la Torre del Reloj siendo Secretario de Trabajo. La segunda es que recibió ese nombre por un boxeador llamado Benjamin Caunt, conocido como “Big Ben”. De todas formas, desde el 2012 pasó a llamarse Elizabeth Tower.
Pero bueno, la historia del Big Ben se remonta a 1834, cuando el Palacio de Westminster original fue destruido en un incendio, y se reconstruyó incluyendo la torre gótica de 96 metros de altura, con cuatro relojes de 7 metros de diámetro, situados en cada una de sus caras. Las manecillas pesan alrededor de 100 kilos y la torre se terminó de construir en 1858.
El sonido de las campanas del Big Ben se transmite todos los días a la medianoche por la BBC, en forma ininterrumpida, desde 1923. La primera campanada es la que indica la hora y para los londinenses es toda una tradición. Por cierto, la visita al interior de la torre está reservada sólo a los residentes del Reino Unido.
Sabías que aunque el Big Ben se caracteriza por su fiabilidad, los ingleses no olvidan la Nochevieja de 1962, cuando entraron con 10 minutos de retraso en el nuevo año debido a algunos fallos técnicos producidos en el reloj.
PALACIO DE WESTMINSTER
Junto al Big Ben, el Palacio de Westminster, un edificio gótico victoriano, que también se conoce como Houses of Parliament, y que alberga las dos Cámaras que componen el Parlamento Británico: la Cámara de los Lores y la Cámara de los Comunes.
Como ya les conté en octubre de 1834, un incendio destruyó el antiguo palacio que había alojado el Parlamento desde 1512. El edificio también había servido como residencia real en Londres desde la época de Guillermo el Conquistador.
Del antiguo palacio sólo se pudo salvar una ínfima parte, compuesta por el Westminster Hall, los claustros y la cripta de St Stephen’s Chapel y la Jewel Tower, una construcción del siglo XIV en la que se guardaban las joyas y el oro.
Para la construcción del nuevo palacio se presentaron 97 proyectos. En 1847, el edificio estaba prácticamente listo con sus 1200 habitaciones, 100 escaleras, 11 patios, 3,5 kilómetros de pasillos, y su ostentosa fachada de 290 metros, cuyos pináculos dorados y estatuas de los reyes se reflejan en el Támesis, ofreciendo un bello espectáculo.
El palacio se encuentra flanqueado por el Big Ben y por la Victoria Tower, una imponente torre que reúne las copias de todas las leyes del Parlamento desde 1497.
El Palacio de Westminster sólo se puede visitar los sábados y durante los meses de verano. Las entradas se pueden conseguir haciendo cola el mismo día, pero es recomendable llegar pronto. Y si quieres entrar en una de las sesiones parlamentarias, debes acercarte de lunes a jueves a la entrada de la calle St Margaret.
Sabías que el Palacio de Westminster fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1987.
Parliament Square, Westminster / Metro: Westminster (líneas Circle, District, Jubilee) / Autobuses: líneas 3, 11, 12, 24, 53, 87, 88, 148, 159, 211, 453, N2, N3, N11, N87, N136, N155, N159, N381
Visitas guiadas: Sábado: 9:15 a 16:30 horas / Agosto: Lunes: 13:15 a 17:30 horas / Martes a viernes: 9:15 a 17:30 horas / Septiembre: Martes a viernes: 9:15 a 16:30 horas / Sesiones parlamentarias: Octubre a julio: Lunes y martes: 14:30 a 22:30 horas / Miércoles: 11:30 a 19:30 horas / Jueves: 10:30 a 18:30 horas
Adultos: entre 25 y 28 £ (varía si es con guía o audioguía) / Estudiantes: entre 21y 23 £ / Niños de 5 a 15 años: 12 £ / Niños hasta 5 años: entrada gratuita / * Entrada gratuita con London Pass
https://www.parliament.uk/about/living-heritage/building/palace/
ABADÍA DE WESTMINSTER
A unos pasos del Palacio, visitamos la Abadía de Westminster, el templo más antiguo de Londres, sede de las coronaciones y sitio que acoge las tumbas de los monarcas y figuras históricas británicas de los últimos mil años.
La abadía, construida en estilo románico, fue consagrada en el año 1065 para dar cobijo a los monjes benedictinos. Entre 1245 y 1517 fue reconstruida con un estilo gótico y durante el siglo XVIII sufrió su mayor transformación, tras la construcción de las dos torres de la entrada principal.
A pesar de que fue incautada por Enrique VIII durante la disolución de los monasterios en 1534 y clausurada en 1540, se salvó de ser destruida gracias a que se encontraba bajo el control directo de la Corona de Inglaterra, fuera de la jurisdicción de la Iglesia. Desde la coronación de Guillermo el Conquistador en el año 1066, todos los monarcas ingleses han sido coronados aquí utilizando un trono de coronación medieval del siglo XI que aún se conserva.
Algunos de los acontecimientos más recientes celebrados en la abadía han sido el 80º cumpleaños de la reina Isabel II o el funeral de la princesa Diana de Gales.
Y si por fuera la Abadía de Westminster es digna de admirar, debes entrar para descubrir su majestuosidad y conocer toda la historia que alberga entre sus muros. No te puedes perder un paseo por Lady Chapel, una de las capillas más impresionantes con sus sillas del coro que datan de 1512; el rincón de los poetas, que acoge las tumbas y mausoleos de grandes genios de la literatura; o el Trono de San Eduardo, un trono de coronación medieval del siglo XI en el que se sientan los soberanos para ser coronados por el Arzobispo de Canterbury.
Imperdibles son también los Claustros construidos entre los siglos XIII y XIV, y que comunican la iglesia de la abadía con el resto de las dependencias; la Sala Capitular, una estancia con estructura octogonal que aún conserva los suelos de mosaico del siglo XIII; y Collage Garden, el parque más antiguo de Inglaterra con más de 900 años de antigüedad.
Sabías que además de los reyes de Inglaterra, otras personas célebres cuyos restos reposan en la abadía son Charles Darwin, Isaac Newton, Charles Dickens, Henry Purcell, Lord Byron, entre otros.
20 Deans Yard, Westminster / Metro: Westminster (líneas Circle, District, Jubilee) o St James’s Park (líneas Circle, District) / Autobuses: líneas 11, 24, 148, 211, 784, 799, N2, N11, N44, N136
Abadía: Lunes a viernes: 9:30 a 15:30 horas (los miércoles hasta las 18:00 horas) / Sábado: Mayo a agosto: 9:00 a 15:00 horas, septiembre a abril: 9:00 a 13:00 horas / Domingo: cerrado / Claustros: Lunes a domingo: 8:00 a 18:00 horas
Adultos: 24 £ / Mayores de 65 años y estudiantes: 21 £ / Niños de 6 a 17 años: 10 £ / Niños menores de 5 años: entrada gratuita / * Entrada gratuita con London Pass
https://www.westminster-abbey.org/es
LONDON EYE
Después cruzamos el Támesis y nos fuimos a The London Eye, para el que habíamos comprado las entradas previamente en internet. Esto porque en determinadas épocas, las filas para subir pueden ser de más de una hora, por eso te recomiendo adquirir tu entrada con anticipación.
Inaugurada en marzo del 2000 para celebrar el cambio de milenio, esta noria de 135 metros de altura fue diseñada como una metáfora del paso del tiempo. Su construcción duró un año y medio, y las 32 cabinas de cristal con capacidad para 25 pasajeros y de 10 toneladas de peso cada una, fueron elaboradas en Francia.
Conocida también como Millennium Wheel, su estructura gira tan lentamente que la gente puede subir a las cápsulas sin que ésta se detenga. El giro completo dura aproximadamente 30 minutos y desde arriba hay unas vistas panorámicas impresionantes de todo Londres. En los días despejados incluso es posible alcanzar una visibilidad de 40 kilómetros a la redonda.
Un imperdible de la ciudad que también ofrece la posibilidad de hacer un viaje privado, con champaña y cena incluidos, por alrededor de 350 £.
Sabías que The London Eye fue la mayor noria del mundo hasta el año 2006, cuando fue superada por la Estrella de Nachang en China. En 2008, los 165 metros del Singapore Flyer marcaron un nuevo record.
Riverside Building, County Hall, Westminster Bridge Road / Metro: Waterloo (líneas Bakerloo, Jubilee, Northern, Waterloo & City) / Autobuses: líneas 12, 53, 77, 148, 159, 211, 381, 453, 734, N109, N155, N381
Septiembre a marzo: 11:00 a 18:00 horas / Abril y mayo: 11:00 a 18:00 horas (algunos días hasta las 20:30 horas) / Junio a agosto: 10:00 a 20:30
Ticket estándar: Adultos: 31 £ / Niños de 3 a 15 años: 27,50 £ / Menores de 3 años: entrada gratuita / Fast track ticket (entrada sin filas): Adultos: 41 £ / Niños de 3 a 15 años: 37,50 £ / Menores de 3 años: entrada gratuita
https://www.londoneye.com
Incluido en el ticket del London Eye estaba un crucero por el Támesis, el que abordamos en un muelle junto a la noria. El tour dura 40 minutos y navega por el río Támesis, donde vimos algunos de los monumentos más famosos de la ciudad, como el Palacio de Westminster y el Big Ben, la Catedral de San Pablo, el museo Tate Modern, la Torre de Londres, el Tower Bridge y otros tantos.
JAMES’S PARK
Desde el embarcadero del London Eye, volvimos a cruzar el Westminster Bridge en dirección al St. James’s Park, el parque real más antiguo de la ciudad, situado muy cerca del Palacio de Buckingham.
La historia del parque se remonta a 1532, cuando Enrique VIII compró el terreno de 23 hectáreas y drenó los pantanos para utilizarlo como uno de sus múltiples cotos privados de caza. Fue a finales del siglo XVII que la zona fue transformada en un jardín de estilo francés y, posteriormente, Carlos II encargó la construcción del actual parque.
El parque cuenta con un hermoso lago artificial repleto de aves que se encuentra envuelto por un manto de flores, arbustos y cipreses, que convierten a St James’s Park en un oasis de tranquilidad en medio de Londres.
Junto al Palacio de Buckingham / Metro: St. James’s Park (líneas District y Circle Line) o Westminster (líneas Jubilee, District y Circle) / Autobuses: líneas 3, 11, 12, 24, 29, 53, 77A, 88, 91, 148, 159, 211 y 453
Lunes a domingo: 5:00 a 24:00 horas
Entrada gratuita
https://www.royalparks.org.uk/parks/st-jamess-park
PALACIO DE BUCKINGHAM
Atravesando el parque nos encontramos de frente con el Palacio de Buckingham, la residencia de la Familia Real Británica en Londres desde 1837 y donde actualmente, vive la reina Isabel II.
Construido en 1703 para el duque de Buckingham, el edificio fue adquirido por el rey Jorge III en 1762 para ser utilizado como residencia privada. Desde su construcción ha sido ampliado y remodelado en varias ocasiones.
Durante las dos guerras mundiales, el palacio sobrevivió de manera ejemplar. En la Primera Guerra Mundial tuvo la suerte de no ser atacado pero, durante la Segunda Guerra Mundial, fue bombardeado en diferentes ocasiones, siendo el más importante el que destruyó la capilla real en 1940.
El Palacio cuenta con 600 habitaciones, donde se incluyen las 19 State Rooms, 52 dormitorios reales y de invitados, 188 habitaciones para los empleados y 78 baños. Sus jardines son los jardines privados más grandes de Londres.
Ten en cuenta que el Palacio de Buckingham está abierto al público sólo entre agosto y septiembre, cuando la reina visita Balmoral. En las visitas se puede acceder al Salón de Baile, las Salas de Estado y los Jardines Reales.
Así que si no consigues entrar, una buena opción es presenciar el famoso cambio de guardia, una tradicional y atractiva ceremonia que tiene lugar todos los días a las 11:30 de la mañana entre mayo y julio. El resto del año sólo se realiza en días impares.
Sabías que cuando la reina está en el palacio ondea la bandera oficial del soberano británico y cuando no está, ondea la bandera británica.
Buckingham Palace Road / Metro: Green Park (líneas Jubilee, Piccadilly y Victoria) / Autobuses: líneas 11, 211, 239, C1 y C10
21 de julio al 31 de agosto: 9:30 a 19:30 horas / 1º de septiembre al 30 de septiembre: 9:15 a 18:30 horas
State Rooms: Adultos: 26,50 £ / Estudiantes y mayores de 60 años: 24 £ / Menores de 17 años: 14,50 £ / Menores de 5 años: entrada gratuita / Royal Day Out (incluye los State Rooms, las Cocheras Reales y la Galería de la Reina): Adultos: 49 £ / Estudiantes y mayores de 60 años: 44,50 £ / Menores de 17 años: 26,50 £ / Menores de 5 años: entrada gratuita
https://www.rct.uk/visit/the-state-rooms-buckingham-palace
GREEN PARK
Junto al Palacio nos encontramos con el Green Park, otro de los parques reales y que igual que St James’s, era un lugar pantanoso en el que se enterraba a los leprosos del cercano Hospital St. James’s. Eso hasta que, en el siglo XVI, el terreno fue delimitado como terreno de caza por Enrique VIII.
En 1668, bajo las órdenes de Carlos II, el terreno se transformó en un parque que pronto se convertiría en el lugar elegido para los duelos y como refugio de ladrones. Sin embargo, en la actualidad, el Green Park se diferencia de sus vecinos St James’s Park y Hyde Park por ser mucho más tranquilo, razón por la que la gente acude a descansar, pasear, hacer footing o de picnic.
Y es como lo indica su nombre, su belleza radica en los cientos de árboles y zonas verdes que ofrecen un espacio ideal para descansar y desconectarse un momento.
Junto al Palacio de Buckingham / Metro: Green Park (líneas Jubilee, Piccadilly y Victoria)
Abierto todos los días, las 24 horas
Entrada gratuita
https://www.royalparks.org.uk/parks/green-park
TORRE DE LONDRES
Montados en un autobús turístico hicimos un rápido recorrido por los principales atractivos de Londres, antes de bajarnos en la Torre de Londres, un castillo que a lo largo de su historia, ha funcionado como residencia real, arsenal, fortaleza y prisión.
Construida en el año 1066, bajo el reinado de Guillermo el Conquistador, la Torre de Londres fue sinónimo de terror, pues allí eran encerrados todos aquellos que ofendían al monarca, viviendo en condiciones espantosas, muchos de ellos siendo torturados antes de ser ejecutados en la cercana Tower Hill.
Fueron muchos los personajes de gran relevancia que tuvieron la desgracia de sufrir entre las paredes de la Torre de Londres, entre los que se incluyen algunos reyes derrocados, aristócratas y clérigos acusados de traición. Entre los personajes que fueron ejecutados en la Torre Verde están la reina consorte Ana Bolena, la reina Jane Grey, el barón William Hastings, o el pensador y escritor Tomás Moro.
Con el paso de los siglos, la Torre de Londres fue perdiendo importancia, hasta que en el siglo XIX se hizo una remodelación para convertirla en un castillo medieval y fue abierta al público.
Aquí recorrimos la Torre Blanca, que es el edificio central y el más antiguo, además del que le da nombre a la fortificación. Construida entre los años 1078 y 1100, la White Tower ha funcionado como residencia real, armería y prisión.
También vimos el Palacio Medieval, una imponente fortaleza que fue hogar para los miembros de la realeza y que aún conserva algo del mobiliario de la época; y la Capilla Real de San Pedro y Vincula, donde se conservan los restos de los prisioneros más famosos que fueron ejecutados en la torre.
Por último visitamos las Joyas de la Corona, que son coronas, espadas y cetros de incalculable valor, tanto así que para verlas hay que montarse en una cinta transportadora que avanza rápidamente frente a ellas, sin poderlas apreciar con mucho detalle.
Sabías que todas las noches a las 21:30 horas, desde hace 700 años, se celebra la Ceremonia de las Llaves, en la cual el “Chief Yeoman Warder”, jefe de la Guardia de la Torre, cierra la puerta y entrega las llaves al “Resident Governor”.
St Katharine’s & Wapping, Tower Hill / Metro: Tower Hill (líneas Circle, District y DLR) / Autobuses: 8, 9, 11, 15, 15B, 22B, 25, 133 y 501
Marzo a octubre: Martes a sábado: 9:00 a 17:30 horas / Domingo y lunes: 10:00 a 17:30 horas / Noviembre a febrero: Martes a sábado: 9:00 a 16:30 horas / Domingo y lunes: 10:00 a 16:30 horas
Adultos: 25 £ / Estudiantes y mayores de 65 años: 20 £ / Niños entre 5 y 15 años: 12,50 £ / Menores de 5 años: entrada gratuita / * Entrada gratuita con London Pass
https://www.hrp.org.uk/tower-of-london/#gs.ttamq6
THE MONUMENT
En camino para tomar el metro de regreso al hotel, pasamos por The Monument, el Monumento al Gran Incendio de Londres, que fue construido entre 1671 y 1677, en recuerdo a esa tragedia y para conmemorar la reedificación de la ciudad.
Se trata de una gran columna dórica de piedra de 61 metros de altura coronada por una urna con forma de fuego, que representa el Gran Incendio de Londres de 1666. Los 61 metros de altura coinciden con la distancia a la que se encuentra del lugar en el que comenzó el incendio, la panadería Thomas Farynor.
Y aunque se puede subir una estrecha escalera de caracol de 311 escalones para llegar a la cima del monumento, mi recomendación es que, para continuar con la historia del incendio, vayas a “The Golden Boy of Pye Corner”, que marca el lugar en el que terminó el incendio. Se encuentra en el cruce entre Giltspur Street y Cock Lane.
COVENT GARDEN
La siguiente mañana nos levantamos temprano y tomamos el “Tube” hasta Covent Garden, uno de los barrios más populares de Londres, ya que forma parte de la historia y la evolución de la ciudad, pues aquí se establecieron los primeros restoranes y teatros.
La zona de Covent Garden es una de las más antiguas de la ciudad, ya que en el siglo I allí había un asentamiento romano. En el siglo XIII, formaba parte del jardín del convento y abadía Saint Peter de Westminster, conocido popularmente como “convent garden”, abasteciendo a la ciudad de frutas y verduras durante 700 años.
Pero la historia de la actual plaza comenzó en el siglo XVII, cuando el terreno pasó de manos de los monjes de Westminster a ser propiedad de los condes de Bedford, por lo que en 1631, comenzaron las obras para convertir la zona de cultivo en la primera plaza abierta de Inglaterra.
En 1660 se creó un gran mercado de flores, frutas y verduras que hizo famoso al barrio y, a principios del siglo XIX, el aspecto de la plaza se vio modificado por la construcción de tres pabellones cubiertos que pasaron a alojar el mercado.
Más recientemente, en 1974, el edificio del mercado fue rehabilitado para ser transformado en un área comercial que se ha mantiene hasta hoy y que atrae tanto a turistas como a londinenses con su ambiente bohemio y acogedor.
Aquí se puede disfrutar de las tiendas de moda situadas en Floral Street, de los pequeños puestos de los artesanos en el mercado cubierto o bien, pasar un rato agradable tomando un café en cualquiera de las cafeterías.
Sabías que en 1798 se instaló en Maiden Lane el restorán Rules, el más antiguo de Londres y que aún funciona en el mismo lugar y sirve comida típica inglesa.
LONDON TRANSPORT MUSEUM
Como fanáticos de los trenes, en la misma zona visitamos el London Transport Museum, un museo que funciona en el antiguo edificio del mercado de flores de Covent Garden y que muestra la historia de los medios de transporte que revolucionaron Londres en el pasado.
Y es que la historia del transporte de Londres va ligada estrechamente a la vida social y al crecimiento y evolución de la ciudad, ya que algunos distritos comenzaron a desarrollarse con la llegada del metro y otros medios de transporte.
El museo cuenta con fotografías antiguas que muestran la evolución de los diferentes medios de transporte, hasta los primeros carteles publicitarios con los que se trataba de convencer a la sociedad para que los utilizara. Se agradece que los objetos se encuentren expuestos cronológicamente, por lo que las exposiciones son muy claras y permiten conocer la evolución de los medios de transporte en la ciudad.
Pero las joyas del museo son algunas reliquias como el autobús urbano más antiguo de Londres, que funcionaba tirado por caballos; la primera locomotora que se utilizó tras la construcción del tren suburbano, o los modelos más antiguos de los autobuses de dos pisos. Sin duda, un museo entretenido en el que se aprende y disfruta contemplando los medios de transporte que revolucionaron la ciudad en el pasado.
Covent Garden Piazza / Metro: Covent Garden (línea Piccadilly) / Autobuses: Strand o Aldwych (líneas RV1, 9, 11, 13, 15, 23 y 139)
Lunes a domingo: 10:00 a 18:00 horas (viernes desde las 11:00 horas)
Adultos: 18,50 £ / Estudiantes y mayores de 60 años: 17 £ / Menores de 18 años: entrada gratuita / * Entrada gratuita con London Pass
https://www.ltmuseum.co.uk
TRAFALGAR SQUARE
Desde el Museo del Transporte anduvimos hasta Trafalgar Square, una de las plazas más importantes de Londres, pensada en 1830 para conmemorar la victoria de la armada británica frente a la española y la francesa en la Batalla de Trafalgar.
La plaza está rodeada por la National Gallery, al norte, por la iglesia St Martin in the Fields y la embajada de Sudáfrica al este, y al oeste por la embajada de Canadá, además de Charing Cross, la calle que marca el kilómetro 0 de Inglaterra.
Y en el centro de Trafalgar Square se alza la majestuosa Columna de Nelson, construida en 1843 en honor al almirante Nelson, fallecido mientras se encontraba al mando de la armada británica en la Batalla de Trafalgar. La columna de granito de casi 50 metros de altura está coronada por una estatua del almirante y rodeada por cuatro enormes leones, hechos a partir del bronce fundido de los cañones de la flota francesa.
En las cuatro esquinas de la plaza hay cuatro pedestales. En tres de ellos hay estatuas ecuestres: Jorge IV al noreste, Henry Havelock al sureste, y Charles James Napier al suroeste. Como para el cuarto nunca hubo acuerdo sobre a qué personaje poner, desde 1990, está destinado a albergar obras de arte contemporáneo.
Una curiosidad es que en la esquina sureste encontraremos un curiosos elemento, las Medidas Imperiales, que muestran los estándares usados en 1876, ya en desuso, y sus equivalentes con las medidas actuales (pies y yardas).
Sabías que como muestra de agradecimiento del pueblo noruego al apoyo británico durante la Segunda Guerra Mundial, desde 1947 es tradición que Noruega done un abeto para colocarlo como árbol de navidad en la plaza.
NATIONAL GALLERY
En la misma plaza, aprovechamos de visitar la National Gallery, el museo de arte más prestigioso de Londres y uno de los más famosos a nivel mundial, cuya entrada es gratuita.
Los inicios de la National Gallery se remontan a 1824, cuando el estado británico compró los 38 cuadros de la colección privada del banquero John Julius Angerstein. A partir de entonces, comenzó un rápido e importante desarrollo, contando actualmente con más de 2.300 pinturas, dos tercios de las cuales han sido donaciones privadas. Lo anterior ha provocado que la galería halla tenido que cambiarse varias veces de ubicación, hasta llegar a su actual edificio en Trafalgar Square.
Las colecciones permanentes del museo recorren las pinturas del Renacimiento Temprano y Clásico, el Barroco, el Manierismo, el Rococó, el Impresionismo y el Post-impresionismo; con sus principales exponentes. Algunas de las pinturas que merecen la pena verse en tu recorrido son los Girasoles de Van Gogh; Baco y Adriana de Tiziano; Bañistas de Paul Cézanne; Bañistas en La Grenouillère de Claude Monet; Sansón y Dalila de Rubens; La Venus del Espejo de Diego Velázquez; o Venus y Marte de Boticelli, entre muchas otras.
Trafalgar Square / Metro: Charing Cross (líneas Northern y Bakerloo) o Leicester Square (líneas Northern y Piccadilly) / Autobuses: líneas 3, 6, 9, 11, 12, 13, 15, 23, 24, 29, 53, 77A, 88, 91, 139, 159, 176 y 453
Lunes a domingo: 10:00 a 18:00 horas (viernes hasta las 21:00 horas) / Cerrado: 1º de enero, 24, 25 y 26 de diciembre
Entrada gratuita
https://www.nationalgallery.org.uk
CATEDRAL DE SAN PABLO
A pie por Fleet Street llegamos a la Catedral de San Pablo, la segunda catedral más grande del mundo, después de la Basílica de San Pedro en el Vaticano.
El sitio en el que se encuentra situada la Catedral ha estado ocupado por edificios religiosos desde tiempos inmemoriales. De hecho, la iglesia actual es la quinta edificada en el mismo lugar y fue diseñada por Sir Christopher Wren. Fue construida entre 1675 y 1710, después de que la anterior fuera destruida por el Gran Incendio de Londres de 1666.
En su interior, además de las distintas capillas, se pueden ver los monumentos al Duque de Wellington, el Almirante Nelson, el pintor Turner y el explorador Robert Scott. Pero su principal atractivo es su cúpula, compuesta por tres galerías circulares y que se empina a los 113 metros de alto.
Porque tras un ascenso de 259 escalones se llega hasta la primera de ellas, la Galería de los Susurros, un lugar con una increíble acústica en el que se puede oír hasta el más mínimo sonido producido en el extremo opuesto del domo. Después de subir 378 escalones más se llega hasta la Galería de Piedra, que rodea la cúpula. Finalmente, a 528 escalones y 85 metros de altura está la Galería Dorada, desde donde se tienen unas espectaculares vistas de la ciudad.
Por su parte, en la cripta se conservan algunos fragmentos de los anteriores templos y diferentes monumentos y memoriales, además de los restos de algunos grandes personajes británicos como Nelson, Wellington o Churchill. Lamentablemente, no está permitido filmar ni sacar fotos en el interior de la Catedral, pero igual me porté mal y logré tomar un par.
Sabías que en la Catedral de San Pablo se celebró el matrimonio entre el príncipe Carlos y Lady Diana en 1981, y los funerales de Nelson en 1806 y de Churchill en 1965.
St. Paul’s Churchyard / Metro: St Paul’s (línea Central) o Mansion House (líneas Circle, District) / Autobuses: líneas 4, 11, 15, 23, 25, 26, 100 y 242
Lunes a sábado: 8:30 a 16:30 horas
Adultos: 20 £ / Estudiantes y mayores de 60 años: 17,50 £ / Niños de 6 a 17 años: 8,50 £ / * Entrada gratuita con London Pass
https://www.stpauls.co.uk
MILLENIUM BRIDGE
Desde la Catedral de San Pablo bajamos hacia el Támesis por Peter’s Hill hasta llegar al Millenium Bridge, un polémico puente peatonal de 325 metros de largo, ya que dos días después de ser inaugurado en junio de 2000, tuvo que ser cerrado para realizarle modificaciones.
Los balanceos del Millenium Bridge hicieron que se ganase el apodo de “Wobbly Bridge”, por lo que después de dos años, fue reabierto en febrero de 2002 sin volver a dar problemas, por lo que ahora se puede recorrer tranquilamente y disfrutar de las vistas que ofrece de la ciudad y el río.
Cabe destacar que fue el primer puente que se inauguró desde que se construyera el Tower Bridge en 1894, uniendo la zona de Bankside con la City. El lado norte del puente se encuentra cerca de la School of London City y de la Catedral de San Pablo, mientras que su lado sur está cerca del teatro The Globe, de la Galería de Bankside y del Tate Modern.
Sabías que el costo final del puente fue de 18,2 millones de libras, 2,2 millones por encima del presupuesto anunciado. A eso hay que sumarle 5 millones más por las obras que se debieron implementar tras su fallida inauguración.
TATE MODERN
Cruzando el Millenium Bridge nos encontramos con el antiguo edificio de la Central Eléctrica de Bankside, que en la actualidad alberga al Museo Nacional Británico de Arte Moderno, más conocido como el Tate Modern.
El museo exhibe obras que abarcan desde el año 1900 hasta la actualidad, por lo que los principales movimientos de los siglos XX y XXI tienen un espacio: fauvismo, surrealismo, expresionismo abstracto, expresionismo ruso, arte pop, arte minimalista y arte conceptual. También están presentes todas las formas de representación: collages, instalaciones, esculturas y pinturas, arte digital, fotografía.
Aquí pudimos ver obras de algunos de los más grandes artistas del siglo XX como Dalí, Andy Warhol y Picasso, aunque la mayor parte de la colección es de artistas británicos. Una visita súper recomendada, porque además de ser gratuita, el edificio resulta súper fácil de recorrer.
Sabías que el Tate Modern es el museo de arte moderno más visitado del mundo, superando al MoMA de Nueva York y al Museo Reina Sofía de Madrid.
Bankside / Metro: Southwark (línea Jubilee) / Autobuses: RV1, 45, 63 100, 381 y 344
Domingo a jueves: 10:00 a 18:00 horas / Viernes y sábado: 10:00 a 22:00 horas
Entrada gratuita
https://www.tate.org.uk/visit/tate-modern
CITY HALL
Luego, caminando hacia el este junto a la ribera sur del Támesis, llegamos al City Hall, un peculiar edificio de apariencia futurista que es la sede de la Greater London Authority, comprendiendo la alcaldía de Londres y la Asamblea.
Inaugurado en el año 2002, fue diseñado por Norman Foster, arquitecto que también se encargó de la cúpula del Parlamento de Berlín. Con 45 metros de altura divididos en 10 plantas, el edificio de cristal está diseñado para ahorrar energía mediante diferentes sistemas como el reciclado del calor de los computadores y la sustitución de los aparatos de aire acondicionado por pequeñas ventanas situadas en cada una de las oficinas.
TOWER BRIDGE
Desde el edificio del Ayuntamiento, el Tower Bridge con su característica silueta ya era visible. Situado junto a la Torre de Londres, este llamativo puente levadizo de estilo victoriano es uno de los símbolos de Londres.
Originalmente el único modo de cruzar el Támesis era a través del Puente de Londres, por lo que con el crecimiento de la ciudad, fueron construyéndose otros, pero siempre al oeste del London Bridge. Sin embargo, seguía faltando un viaducto hacia el este, por lo que en 1876, se realizó un concurso público para la construcción de un nuevo puente, que tenía como consigna no interrumpir el tráfico fluvial durante las obras.
El proyecto ganador fue presentado en 1884 por Horace Jones, quien ideó un puente levadizo accionado por máquinas de vapor, el que fue terminado en 1894, después de 8 años de construcción. La cosa es que en el interior se encuentra la maquinaria hidráulica y los ascensores que llevan a la Tower Bridge Experience, una exposición que aprovechamos de visitar.
Aquí vimos la sala de motores donde las calderas de carbón movían el puente hasta que fue electrificado en 1976, además de fotos de los puentes más emblemáticos del mundo entre los que se incluye Tower Bridge y su importancia en la historia de la ciudad. Desde las pasarelas superiores se pueden sacar las mejores fotos de Londres y el Támesis.
Y aunque su hermosa estructura puede disfrutarse de día o de noche, mi recomendación es visitarlo de noche para verlo vestido de luces.
Sabías que antiguamente el puente se abría unas 50 veces al día, mientras que hoy se abre no más de 5 veces al día, especialmente durante el verano o en alguna celebración.
Recorre los callejones con más historia del Londres antiguo con este tour gratuito.
Tower Bridge / Metro: Tower Hill (líneas Circle, District y DLR) / Autobuses: 8, 9, 11, 15, 15B, 22B, 25, 133 y 501
Abril a septiembre: 10:00 a 18:00 horas / Octubre a marzo: 9:30 a 17:30 horas
Adultos: 10,60 £ / Estudiantes y mayores de 60 años: 7,90 £ / Niños de 5 a 15 años: 5,30 £ / Menores de 5 años: entrada gratuita / * Entrada gratuita con London Pass
https://www.towerbridge.org.uk/spanish
MADAME TUSSAUDS
Nuevamente en el metro, llegamos al Madame Tussauds London, el museo de cera más prestigioso del mundo, que expone las figuras de personajes famosos realizadas en cera.
Inaugurado en 1884, el Madame Tussauds de Londres es el primero de los que posteriormente se extendieron por el resto del mundo, por lo que tiene un encanto especial, que lo hace digno de visitar y que, por cierto, lo que lo convierte en uno de los museos más visitados, por lo que suele haber demasiada gente a cualquier hora del día. Razón por la cual, te recomiendo comprar las entradas en internet con anticipación
Cuenta la historia que Marie Tussaud era el ama de llaves de un médico experto en modelismo en cera, por lo que aprendió su oficio y se convirtió en su ayudante. Fue así como en 1835 estableció su primera exposición de figuras de cera, ofreciendo la entrada a seis peniques. Tras convertirse en un éxito, en 1884, el museo se trasladó hasta el edificio en el que se encuentra en la actualidad.
El museo está dividido en secciones: Party, Bollywood, Fashion Week, Sport, Film, Royals, Music, World Leader y otras más. Así encontramos las figuras que representan a la Familia Real, David Beckham y Muhammad Alí, Einstein, Dickens y Picasso, Brad Pitt y Angelina Jolie, Barack Obama, Ghandi y Martin Luther King, Freddy Mercury, Madonna y Bob Marley, entre muchos otros.
Un paseo más que recomendado para disfrutar con niños y para volverse loco sacándose fotos con los personajes más famosos del mundo.
Marylebone Road con Allsop Place / Metro: Baker Street (líneas Bakerloo, Circle, Hammersmith, Jubilee, Metropolitan) / Autobuses: líneas 18, 27, 30, 74, 205, 453, N18, N74, N205
Lunes a viernes: 9:30 a 17:30 horas / Sábado y domingo: 9:30 a 18:00 horas
Adultos: 34 £ / Niños entre 3 y 15 años: 27 £ / Menores de 3 años: entrada gratuita
https://www.madametussauds.com/london/
OXFORD STREET
Para terminar el día, antes de regresar a nuestro hotel, atravesamos el barrio de Marylebone hasta Oxford Street, la calle comercial más concurrida de Europa. Y es que la que fue una zona residencial de lujo hasta principios del siglo pasado, en la actualidad está repleta de tiendas, incluyendo las más importantes cadenas de tiendas inglesas, como los almacenes Selfridges, que son los más antiguos del país, abiertos en 1909.
Oxford Street se extiende por dos kilómetros y medio y está permanentemente abarrotada de gente. Casi en la mitad se halla Oxford Circus, la intersección con la también famosa Regent Street, donde se encuentra el único cruce en diagonal del centro de Londres.
Esta calle se localiza en la ruta de la antigua calzada romana que unía Colchester con Hampshire y en el siglo XVI, se hizo popular por ser el camino que seguían los condenados desde la prisión de Newgate al patíbulo de Tyburn. Las tiendas comenzaron a aparecer en el siglo XIX y durante la Segunda Guerra Mundial sufrió varios ataques aéreos que dañaron y destruyeron muchos de sus edificios.
HYDE PARK
El último día en Londres (más bien las últimas horas), partimos hacia el Hyde Park, el parque más grande del centro de la ciudad, con sus 142 hectáreas, más de 4.000 árboles, su lago y su pradera.
El terreno del parque perteneció antiguamente a la Abadía de Westminster hasta que, en 1536, las tierras fueron expropiadas por Enrique VIII y se abrió como parque público en el siglo XVII. Hyde Park es considerado el parque más antiguo de la ciudad y desde su creación ha sido escenario de duelos, manifestaciones y conciertos. Desde hace años se cumple la tradición de celebrar los aniversarios relacionados con la Casa Real disparando 41 cañonazos al mediodía.
Pero además, el Hyde Park es el gran pulmón de la ciudad, por lo que es el elegido por londinenses y turistas para realizar múltiples actividades como tomar el sol, patinar, andar en bicicleta o tumbarse sobre el césped, ya que es posible alquilar tumbonas en muchas zonas del parque. Nosotros nos animamos a alquilar un bote a remos en el Serpentine, el lago central habitado por una variada fauna acuática.
Y es que recorriendo parque descubriremos muchos lugares y monumentos, como el espectacular Jardín de Rosas, donde también hay una gran pérgola y dos fuentes; o la Fuente Memorial de Diana, inaugurada en 2004 y cuyo extraño diseño representa la vida de la princesa Diana de Gales.
Otros memoriales distribuidos por el parque son el Memorial del 7 de Julio, que son 52 columnas que conmemoran a las 52 víctimas de los atentados de Londres del 7 de julio de 2005; el Memorial del Holocausto; o el Memorial de la Reina Carolina. Las estatuas y fuentes también tienen su espacio ganado en el Hyde Park con la estatua de Peter Pan, la Fuente del Niño y el Delfín, la escultura de Isis, entre otras tantas.
Un paseo maravilloso para nuestra última mañana en Londres, un imperdible que debes anotar en tu listado de las cosas que hacer en Londres.
Sabías que en la esquina noreste de Hyde Park se encuentra Speakers’ Corner, un curioso lugar donde desde 1872 está permitida la libertad de expresión, por lo que se ha convertido en sitio para discursos públicos, debates y protestas. Algunos famosos oradores han sido Karl Marx, George Orwell, Vladimir Lenin y William Morris.
Hyde Park / Metro: Knightsbridge y Hyde Park Corner (línea Piccadilly); Lancaster Gate, Queensway y Marble Arch (línea Central) / Autobuses: líneas 2, 6, 7, 8, 9, 10, 14, 15, 16, 19, 22, 30, 36, 38, 52, 73, 74, 82, 137, 148, 274, 390, 414 y 436
Lunes a domingo: 5:00 a 24:00 horas
Entrada gratuita
https://www.royalparks.org.uk/parks/hyde-park
ROYAL ALBERT HALL
Junto al Hyde Park nos encontramos con el Royal Albert Hall, una de las salas de conciertos más famosas del mundo, donde se han presentado artistas de la talla de Ella Fitzgerald, Bill Haley y los Cometas, Bob Dylan, Deep Purple, Luciano Pavarotti, The Who, Adele, Coldplay; además de personalidades como el Dalai Lama, Nelson Mandela, Lady Di y Stephen Hawking.
Aunque la idea de la creación de un salón dedicado a las artes fue del Príncipe Alberto, esposo de la reina Victoria, Alberto nunca llegó a ver su sueño plasmado, pues murió en 1861 y la orden real para su construcción llegó recién en 1867.
El edificio fue inaugurado en 1871 y su diseño se inspiró en los anfiteatros griegos y romanos. La planta circular de ladrillo rojo está cubierta por un domo de cristal y acero, y un gran friso de mosaico recorre toda la circunferencia con escenas que representan “El Triunfo de las Artes y las Ciencias”.
Cientos de eventos y festivales de todo tipo se han realizado en el Royal Albert Hall desde su inauguración. Por ejemplo, en 1950 se presentó la familia von Trapp, cuya historia se cuenta en la película “La novicia rebelde”; y en 1963, Los Beatles y Los Rolling Stones se presentaron juntos por primera vez en un escenario, durante el festival Great Pop Prom.
Sabías que hay 13.000 “A” de “Albert” repartidas por todo el auditorio y que aquí se encuentra la mayor alfombra tejida del mundo, fabricada con 326.666 vellones de oveja y 49 millones de mechones. Está en el libro Guinness de los récords.
Kensington Gore, South Kensington / Metro: High Street Kensington (líneas Circle y District) o Knightsbridge (línea Piccadilly) / Autobuses: 9/N9, 23, 52, 70, 360, 452, 702, N9 y N52
Noviembre a marzo: 10:00 a 16:00 horas / Abril a octubre: 9:30 a 16:30 horas
Visitas guiadas: Adultos: 17 £ / Estudiantes y mayores de 60 años: 14,50 £ / Niños entre 6 a 16 años: 8,50 £ / Menores de 6 años: entrada gratuita / * Entrada gratuita con London Pass
https://www.royalalberthall.com
PALACIO DE KENSINGTON
Por último, rodeando Kensington Gardens, llegamos al Palacio de Kensington, que a lo largo de su historia ha acogido a diferentes generaciones de la familia real, desde Guillermo III hasta la ascensión de la Reina Victoria, que en 1837 se estableció en el Palacio de Buckingham
Situado en el interior de los jardines de Kensington, este enorme caserón de campo construido en ladrillo rojo fue reformado en 1689 para convertirse en el hogar de la monarquía británica. Después, a lo largo del siglo XIX, el Palacio permaneció casi en estado de abandono, hasta que en 1897 se decidió su restauración. Entre 1981 y 1997 fue residencia de Lady Di, Princesa de Gales, y desde 2013 está ocupado por el Duque y la Duquesa de Cambridge.
Si te animas a visitarlo, cosa que yo no hice por tiempo, podrás recorrer las antiguas estancias privadas de la realeza, que muestran el lujo y la exuberancia con la que vivían, además de una exposición de cartas, joyas, vestidos, tapices y numerosos otros artículos. También puedes caminar por sus hermosos jardines y tomar un té al más puro estilo londinense en la Orangery.
Kensington Gardens / Metro: High Street Kensington (líneas District y Circle) o Queensway (línea Central) / Autobuses: líneas 9, 10, 49, 52, 70, 94, 148, 390 y 452
Marzo a octubre: 10:00 a 18:00 horas / Noviembre a febrero: 10:00 a 16:00 horas
Adultos: 17 £ / Estudiantes y mayores de 65 años: 13,60 £ / Niños entre 5 y 15 años: 8,50 £ / * Entrada gratuita con London Pass
https://www.hrp.org.uk/kensington-palace/#gs.tvd6xl
Y aunque sé que me faltaron muchos lugares por incluir en la lista de los imperdibles y que espero agregar en un próximo viaje a Londres, sí voy a contarles de dos sitios que me parece que deben sumar cuando hagan su viaje a la capital de Inglaterra.
THE SHARD
The Shard es el rascacielos más alto de la Unión Europea con 310 metros de altura y desde su inauguración en 2012, ha definido el skyline de Londres. De sus 87 plantas, 72 son utilizadas por oficinas (pisos 3 al 28), restoranes (31al 33), el lujoso hotel Shangri-La (pisos 34 al 52), apartamentos (53 al 65), un mirador (68 al 72) y la aguja que va del piso 73 al 87.
El cuento es que el mirador del edificio, conocido como “The View”, es junto con el London Eye, el mejor lugar para observar Londres desde las alturas. “The View” está dividido en tres plantas, dos de ellas cerradas y una terraza descubierta, desde donde se tienen vistas en 360º, siendo posible divisar hasta 65 kilómetros a la redonda.
Sabías que The Shard es propiedad del Estado de Qatar y que sus apartamentos privados, de los que solo hay 10, uno por planta, salieron a la venta por precios de entre 30 y 50 millones de libras esterlinas.
32 London Bridge St / Metro: London Bridge (líneas Northern y Jubilee) / Autobuses: líneas 43, 48, 141, 149 y 521
Jueves a sábado: 10:00 a 22:00 horas (acceso hasta las 20:30) / Domingo a miércoles: 10:00 a 19:00 horas (acceso hasta las 17:30) / Cerrado el 25 de diciembre
Adultos: 32 £ / Niños menores de 4 años: entrada gratuita
https://www.theviewfromtheshard.com
SKY GARDEN
El último es un lugar que vi en fotos y que me pareció necesario recomendarles. Se trata de Sky Garden, un espectacular jardín ubicado en las tres últimas plantas de uno de los rascacielos más nuevos de la City y que también, ofrece unas asombrosas vistas panorámicas de la ciudad.
Ubicado en un edificio conocido por su forma como el “walkie-talkie”, el mirador del Sky Garden es completamente acristalado, pero también cuenta con un mirador exterior orientado hacia el Támesis, desde donde se puede ver la zona en la que se encuentra The Shard.
Otra de las gracias de Sky Garden es que cuenta con varios restoranes, como Fenchurch, un restorán de lujo especializado en pescados y mariscos a la parrilla en el que el precio medio por pareja es de unas 120 £. Ahora si solo quieres tomar un trago, Sky Pod Bar es una excelente opción para disfrutar de las vistas de la ciudad, y la cervecería Darwin Brasserie, ideal para tomar algo y probar algunos platos típicos de Londres en un ambiente algo más desenfadado.
Para visitar gratis el Sky Garden de Londres solo tienes que hacer la reserva en su página web. Es recomendable reservar tu entrada lo antes posible, ya que es un lugar bastante solicitado durante todo el año.
1 Sky Garden Walk / Metro: Monument, Tower Hill, Tower Gate, Aldgate, Bank y Mansion House (líneas Circle y District) / Autobuses: línea 40
Lunes a viernes: 10:00 a 18:00 horas / Sábado y domingo: 11:00 a 21:00 horas / Los bares y restoranes tienen un horario más amplio
Entrada gratuita (Reserva tu entrada aquí: https://skygarden.london/booking/)
https://skygarden.london
MAPA
CLIMA
El clima en Londres es uno de los aspectos que más preocupa a quienes planean visitarla, y con razón. Es sabido que Londres tiene un clima complicado, con pocas horas de sol y muchos días de lluvia, así que aquí te voy a contar cuál es la mejor época para viajar.
Londres tiene un clima de tipo oceánico templado, con inviernos fríos y con posibilidad de nieve y heladas. Las temperaturas bajan de los 0 grados muchos días y son comunes los días nublados, aunque eso no signifique que vaya a llover. Esto es típico en Londres y sus habitantes están más que acostumbrados, por lo que siempre es recomendable llevar un paraguas plegable o un impermeable, así como calzado de recambio para tener siempre los pies secos.
La primavera londinense es algo corta y comprende los meses de abril y mayo. Por su parte, el verano es templado, con posibilidad de experimentar alguna ola de calor pasajera como ha ocurrido en los últimos años. Las temperaturas rara vez pasan de los 25ºC de máxima y hay más horas de sol. El verano es la temporada alta y con la mayor afluencia de turistas. El otoño es una temporada de transición, donde las temperaturas van bajando para dar paso a noches frías y a alguna helada temprana.
¿Cuándo viajar a Londres entonces? Eso va a depender de tus intereses, de si te gusta más el frío o el calor, o si te gusta caminar en una ciudad abarrotada de turistas.
Si lo que quieres es evitar el frío, los meses de mayo a septiembre son los más templados, con temperaturas agradables y con los días con más horas de luz, algo a tener en cuenta si quieres aprovechar de recorrer y hacer todo tipo de actividades.
Sin embargo, la época navideña, a pesar de las bajas temperaturas, también tiene sus encantos, porque aunque no lo creas, siempre hay algo interesante que hacer en Londres. Otra cosa que debes tener en cuenta a la hora de elegir cuándo viajar a Londres son sus festividades y celebraciones, como el Día de San Patricio, que se celebra el 17 de marzo.
¿CUÁNTOS DÍAS ESTAR?
Como les conté en el post, mis tres días se hicieron pocos para conocer una ciudad que tiene una infinidad de atractivos para todos los gustos y que está llena de entretenidos mercados en muchos de sus barrios.
Teniendo en cuenta todo esto, creo que como mínimo, una estadía debiera considerar cinco días, pues así podrás disfrutar de la ciudad con cierta tranquilidad, conocer el ambiente, la historia y la cultura londinense. Además, tendrás tiempo suficiente para dedicarle un buen tiempo a ver la Torre de Londres, visitar Camden Town, y los museos como el British Museum o la National Gallery.
Y aparte de los monumentos más conocidos podrás realizar actividades no tan comunes y conocer barrios no tan visitados como Earls Court, perderte por la City de Londres, ver el Tate Modern, conocer The Globe, disfrutar de los mercados de comida callejera, en definitiva, un sinfín de posibilidades que puedes descubrir mientras más días sumes a tu estadía.
ALOJAMIENTO
Londres es una ciudad inmensa y está integrada por más de una treintena de distritos, cada uno de los cuales tiene sus propios atractivos, su encanto y una enorme oferta de alojamiento, lo que hace complicado la elección de la zona en la que quedarse.
Sin embargo, pese a que Londres rebosa encantos y esconde muchos secretos, la mayoría de los atractivos se concentran en el West End y sus distritos circundantes. También hay que tener en cuenta que en Londres los precios suelen ser bastante altos, por lo que deberás llevar un presupuesto holgado si aspiras a alojarte en el West End o en alguno de los barrios más selectos. Además, los precios se incrementan en temporada alta, durante los meses de primavera y verano.
West End: es una vasta área situada en la parte norte del Támesis al oeste de la City, donde se encuentran muchos de los principales atractivos turísticas de Londres como Picadilly Circus, Hyde Park y Trafalgar Square. Comprende, además, barrios tan populares como el Soho, Chinatown, Mayfair o Covent Garden, que están repletos de galerías de arte, cines y teatros, restoranes y mucha vida nocturna. la oferta de alojamientos es inmensa. Sin embargo, los precios de los hoteles son muy elevados, pues una mayoría son hoteles de 4 y 5 estrellas, así que hay muy poca oferta de alojamiento barato.
Westminster: ubicado entre el Soho y el río Támesis, este barrio es la zona más emblemática y turística de la ciudad, pues aquí se encuentran el Big Ben, la Abadía y el Palacio de Westminster, el Palacio de Buckingham y la National Gallery. Es una zona bien comunicada por las estaciones de tren de Charing Cross y Victoria, y estaciones de metro de las líneas verde y amarilla. Una zona céntrica para moverse a pie, pero que sin embargo, cuenta con una oferta de alojamiento más reducida que West End, pero igualmente cara.
Soho: ubicado en pleno centro de Londres es uno de los barrios que están más de moda, con su ambiente bohemio y cosmopolita. En sus calles se encuentran tiendas de diseñadores independientes, restoranes, bares, pubs y teatros, que hacen de él una de las zonas más divertidas e interesantes. Aquí está el Chinatown y Picadilly Circus, y es un barrio muy bien conectado por el transporte público. Alojarse en el Soho es una buena opción si no quieres estar muy lejos de los principales atractivos turísticos, aunque el precio de los alojamientos es bastante elevado.
Covent Garden: situado en la parte sudoeste del centro de Londres, este barrio es uno de los más encantadores de la ciudad, pues está repleto de teatros, cafés y, sobre todo, de mercados y puestos de artesanías. Es una zona céntrica y estratégicamente ubicada en pleno West End entre el Soho, Westminster y la City, por lo que puedes ir caminando a todas partes. En Covent Garden se encuentra el Museo del Transportes de Londres y el Royal Opera House. Es una muy buena para alojarse en Londres, aunque es difícil encontrar algo bajo los 120€ por noche.
The City: es el distrito financiero y una de las zonas más modernas de Londres, donde están algunos puntos de interés turístico como la Catedral de San Pablo, Tower Bridge y la Torre de Londres. Está un poco más alejada del corazón de la ciudad, pero está bien comunicada por las líneas de metro Circle, District y Metropolitan. Los precios son igual de elevados que en los barrios más céntricos, pero la hay buenas ofertas durante los fines de semana, cuando los hombres de negocios vacían los hoteles.
Paddington: este barrio está situado justo al norte del Hyde Park y a unos diez minutos de Oxford Street. Es una zona muy tradicional y tranquila, y sus calles están llenas de tiendas, cafés y restoranes. Además de su cercanía al centro, está muy bien comunicado por Paddington Station, una de las estaciones de metro más importantes que conecta con todos los puntos de la ciudad. Una buena opción si buscas tranquilidad o si viajas en familia. En cuanto a los precios, se puede reservar un buen hotel por menos de 100€ la noche, por lo que resulta ideal si quieres algo barato sin estar lejos del centro.
King Cross: ubicado en el centro de Londres, entre los barrios de Camden y de Covent Garden, es conocido porque aquí se encuentran la estación de Kings Cross y la contigua de St Pancras, donde llegan los trenes del resto de Europa. Lo bueno de esta zona es que el precio de los alojamientos es bastante más barato que en otros barrios, así que es una buena zona para dormir en Londres si lo que quieres es no gastar mucho dinero.
TRANSPORTE
Londres es una de las ciudades mejor conectadas del mundo, pues cuenta con la red de metro más antigua del mundo, una amplia y eficiente red de trenes, sus emblemáticos autobuses de dos pisos y sus estilosos taxis.
Todos los sistemas de transporte público de la ciudad están integrados y recorren cada uno de sus 32 municipios, a lo largo de 9 zonas; la 1 y 2 que engloban el centro de Londres y el resto que se desplazan al extrarradio.
No obstante, el transporte público en Londres tiene un precio bastante elevado, a diferencia de otras capitales europeas.
TARJETA OYSTER
La tarjeta Oyster es una tarjeta magnética recargable que hace más fácil el pago en los medios de transporte público y que además, ofrece precios menores que cuando se compran billetes sencillos.
El saldo en la tarjeta Oyster puede utilizarse de dos formas: pago por uso (pay as you go) o con abono de transporte (Travelcard). Ambas modalidades se pueden utilizar a la vez en ambas tarjetas. Por ejemplo, se puede tener una Travelcard de zonas 1-2 y a la vez pagar un billete sencillo de zonas 1-6 para llegar al Aeropuerto de Heathrow.
¿Cuál te conviene? Si tu viaje es de 3 días o menos, la mejor opción es el sistema de pago por uso, dado que el límite diario es el costo que tendría la Travelcard equivalente (6,50£). Para estancias de más de 4 días, es preferible comprar la Travelcard de 7 días, ya que el costo es menor que el de comprar 4 días por separado.
En cuanto a las tarifas de pago por uso, la tarifa de hora punta se aplica de lunes a viernes entre las 6:30 y las 9:30 y entre las 16:00 y las 19:00 horas. La tarifa “off peak” se aplica en el resto de horarios, los festivos y los fines de semana.
La tarjeta Oyster se puede comprar en las boleterías de las estaciones de metro y London Overground, en las máquinas expendedoras de Oyster que hay en algunas estaciones y en las taquillas de National Rail.
Una de las ventajas es que la tarjeta puede devolverse en los mismos lugares en los que se adquiere y que al devolverla, te reintegran todo el saldo no consumido y las 5 £ que se pagan al comprar la tarjeta.
TRAVELCARD
La Travelcard es una tarjeta que puede ser usada de forma ilimitada de los medios de transporte público durante un tiempo determinado, lo que la convierte en la mejor opción para los turistas. Actualmente sólo se venden tarjetas Travelcard de 24 horas y de 7 días de duración.
La Travelcard de 24 horas se puede adquirir Peak, lo que permite viajar antes de las 9:30 horas; y Off Peak, es decir, que sólo puede ser utilizada a partir de las 9:30 horas.
Se puede adquirir en las estaciones de metro, en los puestos de información turística, en la estaciones de National Rail e incluso en algunos kioskos. Dependiendo del lugar donde la compres, te darán la tarjeta en uno u otro formato. Por ejemplo, en las estaciones de metro, al comprar la Travelcard de 7 días, la recibirás precargada en una Tarjeta Oyster.
METRO
Con sus 11 líneas, la red del metro de Londres es una de las más extensas del mundo, por lo que donde te encuentres, de seguro habrá una estación de metro muy cerca. Por cierto, no te olvides que los londinenses se refieren al metro como “Tube” y, en menor medida, como “Underground”.
Para usar el metro es importante saber que Londres se divide en 9 zonas radiales que comienzan en el centro histórico. El 95% de las atracciones turísticas se encuentran en las zonas 1 y 2, mientras que el aeropuerto de Heathrow está en la zona 6. A la hora de comprar un billete de metro es necesario saber en qué zona se encuentra la parada de origen y la de destino. Sin embargo, excepto que estés alojado lejos del centro, el billete habitual suele ser el de las zonas 1 y 2.
Los siguientes billetes son válidos en todas las zonas indicadas. Por ejemplo, el de las zonas 1-3 permite tomar el metro en la zona 3 y salir en la 1.
- Zonas 1-3: 4,90 £
- Zonas 1-5: 5,90 £
- Zonas 1-6: 6 £
Como los billetes sencillos son bastante caros, es recomendable el uso de las tarjetas Oyster o Travelcard.
El horario de funcionamiento del metro es de 5:00 a 24:00 horas. Los viernes y los sábados, algunas líneas funcionan durante las 24 horas del día. La frecuencia depende de la línea y de la hora del día pero, si te mueves por el centro de Londres, normalmente no tendrás que esperar más de 2 o 3 minutos.
AUTOBUSES
Aunque los famosos autobuses rojos de dos pisos no son el medio de transporte más rápido de Londres, son una buena forma de recorrer el centro de Londres.
La red de autobuses de Londres está compuesta por casi 400 líneas y más de 15.000 paradas, por lo que tratar de orientarse no es tan fácil, aunque la mejor opción suele ser mirar en las mismas paradas las líneas que paran y cuál es su destino.
El precio de un billete sencillo es de 1,50 £ y para abonarlo necesitarás una tarjeta de crédito contactless, una tarjeta Oyster o bien, la Travelcard. Debes tener presente esto porque ya no se admite el pago en efectivo.
El horario y la frecuencia de los autobuses diurnos depende de la línea y del día de la semana, aunque lo habitual es que las líneas principales operen entre las 5:00 y las 24:00 horas.
De todas formas, Londres es una ciudad que nunca duerme, por lo que muchas líneas diurnas funcionan por la noche y se identifican con la letra “N” (por ejemplo, el autobús 15 pasa a ser el N15). La frecuencia de estos autobuses nocturnos depende del día de la semana, pero as noches de los viernes y sábados, puede ser de tan solo 10 o 15 minutos.
TRENES
El sistema de trenes suburbanos de Londres está administrado por la National Rail, que gestiona los servicios de 6 empresas que trabajan conjuntamente en rutas que unen el centro de la ciudad con el Gran Londres, ciudades cercanas y destinos de larga distancia.
Dentro de su entramada red de vías y estaciones, hay 9 que tienes que tomar en cuenta cuando visites la ciudad:
- Waterloo: conecta el suroeste con el centro de la ciudad y tiene conexión con las líneas de metro Bakerloo, Jubilee y Northern.
- Victoria: es la estación que conecta el aeropuerto de Gatwick con el centro de Londres, así como también con el sur y la costa sudoeste. Podrás acceder al metro en las líneas Circle, District y Victoria.
- Paddington: es la estación con enlace al aeropuerto de Heathrow. Además, desde aquí salen trenes al oeste de Inglaterra, pasando por Oxford, Bath, Bristol, Cardiff, Playmouth, el sur de Gales, entre otros. Sus conexiones con el metro son Bakerloo, Circle, District y Hammersmith & City.
- St. Pancras: es la estación de llegada de trenes internacionales desde París y Bruselas. También hay enlaces a los aeropuertos de Luton y Gatwick y conexiones con las líneas de metro Hammersmith & City, Metropolitan, Northern, Piccadilly y Victoria.
- King’s Cross: los trenes de esta estación van al noroeste de Inglaterra y el este de Escocia. Aquí no puedes dejar de tomarte una foto en andén 9¾ de Harry Potter. Conecta con el metro en las líneas Hammersmith & City, Metropolitan, Northern, Piccadilly y Victoria.
- Euston: une el este de centro y norte de Inglaterra con el corazón Londres. Cuenta con rutas a las principales ciudades del oeste de Escocia como Birmingham, Manchester, Liverpool y Chester. De aquí puedes conectar con las líneas de metro Northern y Victoria
- Charing Cross: sirve al aeropuerto de Gatwick, así como al sureste de Inglaterra conjuntamente con las estaciones de London Bridge y Cannon Street.
- Liverpool Street: tiene salidas desde el aeropuerto de Stanted y enlaza con las líneas Hammersmith & City, Metropolitan, Northern, Piccadilly y Victoria.
Cada una de las líneas tiene su propio horario, pero en general, el servicio va desde las 5 o 6 de la mañana hasta las 23:00 horas. Puedes consultarlos en la página oficial de National Rail: https://www.nationalrail.co.uk
En cuanto a los billetes y precios, hay:
- Advance tickets: son billetes de un solo viaje con el que se puede viajar a largas distancias. El precio del billete suele ser bastante económico sobre todo si se compra con antelación. Este tipo de pases son limitados y están disponibles en fechas específicas.
- Off-peak: es el billete más económico de ida y vuelta, ya que sirve para moverse fuera de las horas puntas del tren. Se puede comprar en cualquier momento antes del viaje.
- Anytime: sirven para hacer trayectos de ida y vuelta en cualquier momento y hora del día. Su compra es flexible y sin restricciones.
- Season: permite viajar ilimitadamente dentro de un período de tiempo determinado, entre dos estaciones de tren seleccionadas. Se puede comprar tickets semanales, mensuales, de más de un mes o incluso, un año.
- Railcards: estas tarjetas son especiales para jóvenes (16 a 25 años), grupos de familias y amigos, personas de la tercera edad y personas con movilidad reducida. Si estás dentro de estos grupos, es importante que sepas que puedes ahorrarte hasta ⅓ del precio sobre tarifas regulares.
El precio de cada una de estas opciones depende de las rutas, los días y las horas punta dentro del recorrido. Para que puedas calcular un presupuesto estimado, la página de la National Rail cuenta con una calculadora de tickets.
RIVER BUS
El River Bus es el servicio regular de transporte por el Támesis, que cuenta con 5 rutas y con paradas en 20 embarcaderos, entre Putney y Woolwich. Operada por la empresa MBNA Thames Clipper, ofrece un servicio frecuente con salidas cada 20 minutos aproximadamente. Además, acepta llevar bicicletas y mascotas a bordo, y todos cuentan con cafeterías y WiFi gratis.
Entre los puntos de interés por los que pasa el River Bus están el London Bridge, el London Eye, el Palacio de Westminster, entre otros.
Los precios dependen de las rutas elegidas; igualmente pasa con los horarios, por lo que si quieres conocerlos, te recomiendo consultar la página de la MBNA. La tarjeta Oyster es aceptada y suele tener una tarifa más baja que si se paga en efectivo.
TAXIS
A pesar de ser atractivos y confortables, los famosos Black Cabs de Londres, junto con los taxis de Ámsterdam, son los más caros de Europa. Y aunque su tarifa es un tanto elevada, nadie puede negar que son un gran atractivo turístico.
Los Black Cabs se pueden parar por la calle levantando la mano si llevan la luz encendida y su capacidad es de 5 personas, además del conductor.
En cuanto a los precios, hay tres tarifas diferentes en función del día y la hora:
- Tarifa 1: Se aplica de lunes a viernes de 6:00 a 20:00 horas / Primeros 280 metros o 60 segundos de espera: 2,40 £; cada 140 metros adicionales o 30 segundos de espera: 0,20 £; a partir de 17,20 £ asciende 0,20 £ cada 98 metros o 21 segundos de espera.
- Tarifa 2: Se aplica de lunes a viernes de 20:00 a 22:00 horas, y sábados y domingos de 6:00 a 20:00 horas / Primeros 227 metros o 49 segundos de espera: 2,40 £; cada 113 metros adicionales o 25 segundos de espera: 0,20 £; a partir de 20,80 £ sube 0,20 £ cada 98 metros o 21 segundos de espera.
- Tarifa 3: Se aplica todos los días de 22:00 a 06:00 horas y los días festivos / Primeros 183 metros o 39 segundos de espera: 2,40 £; cada 92 metros adicionales o 20 segundos de espera: 0,20 £; a partir de 25,20 £ asciende 0,20 £ cada 98 metros o 21 segundos de espera.
- Suplementos: Reserva telefónica: hasta 2 £ / Suplemento de recogida en Heathrow: 3,20 £ / Suplemento de Navidad y Año Nuevo: 4 £ / Pago con tarjeta: 12,5% adicional, máximo 1 £
Así, por ejemplo, un trayecto de 1,5 kilómetros puede costar entre 5,60 y 8,80 £; uno de 3 kilómetros entre 8,60 y 13,80 £; y un traslado desde el aeropuerto de Heathrow hasta el centro de Londres puede valer entre 45 y 85 £.
BICICLETA
El nombre del sistema público de alquiler de bicicletas de Londres se llama Santander Cycles y se compone de 400 estaciones y más de 6.000 bicicletas. Al ser un sistema autoservicio, las bicicletas se pueden utilizar las 24 horas del día durante todo el año.
Para poder usar el sistema es necesario pagar una tarifa de acceso, además de los cargos por su uso. Te puedes registrar en cualquiera de las estaciones utilizando una tarjeta de crédito. Para tomar una bicicleta debes seguir las instrucciones de la pantalla para obtener un código que deberás introducir en uno de los anclajes que no se encuentren iluminados. Al dejar la bicicleta en otra estación, colócala en el anclaje y espera a que se ilumine de color verde. Todos los importes se cargarán en la tarjeta al finalizar el período contratado.
Tarifas de acceso: 24 horas: 2 £ / 7 días:10 £ / 1 año: 90 £
Pago por uso: Primera media hora: Gratis / Cada media hora adicional: 1 £ / Hasta 1 hora y 30 minutos: 4 £ / Hasta 2 horas: 6 £
Como consejo, estas bicicletas están pensadas para realizar trayectos cortos, por lo que por tan sólo 5 £ puedes disponer de una bicicleta durante una semana y realizar trayectos ilimitados de menos de 30 minutos.
CONSEJOS
- Como te conté en la sección del clima, el tiempo en Londres es un tema, por lo que aparte de estar preparado para las lluvias con algún paraguas o impermeable, debes también tener en cuenta el viento. En Londres es habitual el viento, por lo que también te recomiendo llevar alguna prenda que te proteja.
- Debes tener en cuenta que los enchufes ingleses son diferentes a los del resto de Europa y del mundo (la corriente eléctrica es de 230 V y sus enchufes son de tres clavijas), por lo que no olvides llevar un adaptador.
- Si quieres cambiar libras, la recomendación es que no lo hagas en el aeropuerto, pues las comisiones son bastante altas. La mejor opción es esperar hasta encontrar una casa de cambio en la ciudad o bien, pagar con tarjeta donde se pueda.
- Una buena alternativa para ahorrar en las atracciones es comprar una London Pass, que además tiene la posibilidad de combinarse con la Oyster Card, que sirve para usar el transporte público.
- No te olvides que en Inglaterra los autos circulan por la izquierda, así que ten mucho ojo con mirar a la derecha antes de cruzar las calles.
- A diferencia de otros países, en Londres no es necesario dejar una propina. Aún así, la mayoría de gente suele dejar entre un 10% y un 15% en establecimientos como restoranes. Donde no suele dejarse es en bares o taxis.
- La mayoría de las tiendas cierra a las 6 de la tarde y los fines de semana sólo funcionan los grandes centros comerciales.
