Desde Madrid tomamos el AVE a Toledo. Son aproximadamente 35 minutos desde la estación de Atocha hasta la Ciudad de las Tres Culturas en el tren de alta velocidad. Una escapada por el día que merece la pena y que voy a desmenuzar en este post.
Pero antes de partir, un poquito de su historia. Situada a 71 kilómetros de Madrid en un escarpado peñón rodeado por el río Tajo, Toledo es conocida comúnmente como la Ciudad de las Tres Culturas, por haber albergado de manera pacífica durante siglos a las comunidades musulmana, cristiana y judía.
Declarada Patrimonio de la Humanidad en 1986, explorar Toledo es hacer un viaje en el tiempo. Sus fabulosos patios árabes, decorados con exquisitas cerámicas y exuberante vegetación, sus estrechos callejones que rebosan encanto y guardan secretos de épocas remotas, y sus grandes monumentos que quitan el aliento; cautivan desde el primer momento.
En sus torres, puentes, templos y castillos todavía se palpita la ciudad medieval que fue la capital de España en tiempos visigodos y que, actualmente, es capital de la provincia homónima y de la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha.
LOS 11 LUGARES QUE NO TE DEBES PERDER
MIRADOR DEL VALLE
Pues bien, en la estación de Toledo contratamos un tour que incluía la entrada a la Catedral Primada y al Alcázar, los dos principales atractivos turísticos de la ciudad, por lo que luego de tomar la van nos detuvimos en el Mirador del Valle, desde donde se tiene una vista de Toledo y sus edificios más emblemáticos.
Y aunque Toledo es una ciudad preciosa, desde donde realmente se aprecia la belleza de la ciudad es desde fuera de la muralla y el Mirador del Valle es el lugar perfecto para contemplar la ciudad como se merece.
Ojo que puedes llegar al mirador en coche, en taxi o en el bus L71 que para cerca de la Puerta de la Bisagra.
PUERTA DE BISAGRA
Al llegar a la ciudad nos encontramos con la Antigua Puerta de Bisagra, una vieja puerta situada en la muralla de Toledo, también conocida como Puerta de Alfonso VI, que da acceso al centro histórico.
Se trata de una puerta de origen musulmán que conserva su estructura frontal prácticamente igual que en sus orígenes, probablemente porque al inaugurarse la Nueva Puerta de Bisagra, en tiempos de Carlos V, se tapió y no fue hasta 1905 cuando fue restaurada para abrirla de nuevo.
Sabías que el nombre de la puerta no se debe al mecanismo de cierre de puertas actuales, sino a su nombre original: “bi-xacra”, que según varios textos del siglo XII, significa “Puerta de la Sagra”.
CATEDRAL PRIMADA DE TOLEDO
Tras pasar la Puerta de Bisagra comenzamos a caminar por las estrechas y hermosas calles de la ciudad hasta llegar a la Catedral, también conocida como la Catedral de Santa María o la Catedral Primada de España.
Se trata de uno de los mejores ejemplos de arquitectura gótica en España, cuya construcción comenzó en el año 1227 sobre los cimientos de una catedral visigoda del siglo VI, la cual fue, a su vez, utilizada como mezquita durante el período musulmán.
Aunque la construcción de la Catedral es de estilo gótico, tiene una clara influencia del estilo francés del siglo XIII. La fachada principal tiene tres puertas: la del Perdón en la parte central, la del Juicio Final a la derecha y la del Infierno a la izquierda. Curiosamente, la puerta del Perdón permanece siempre cerrada, excepto cuando un nuevo arzobispo toma posesión de la Catedral.
En su interior se pueden ver colecciones de El Greco, Caravaggio, Tiziano, Morales, Goya o Rubens, entre otros, aunque a mí lo que más me gustó fue la Capilla Mayor, donde destaca un retablo gótico del siglo XV que cuenta pasajes de la Biblia y que incorpora estatuarias, una filigrana de pilarcillos, agujas, chambranas y doseletes.
También llama poderosamente la atención el Transparente, la obra más famosa del arquitecto y escultor Narciso Tomé, que fue realizado entre 1729 y 1732, y se puede considerar una de las obras más aparatosas del rococó español. Se divide en tres zonas: un altar de mármol con la imagen de la Virgen, un óculo que permite el paso de la luz natural al camarín del Sagrario y el conjunto escultórico que unifica el conjunto con el resto de la bóveda.
Sabías que en la parte superior de la Puerta del Reloj se encuentra uno de los únicos relojes de una sola manilla que existen en el mundo.
Calle Cardenal Cisneros, 1 / Autobuses: líneas L5D, L11, L12, L61 y L62
Lunes a sábado: 10:00 a 18:00 horas (cierra a las 18:30) / Domingos y festivos: 14:00 a 18:00 horas (cierra a las 18:30) / * Acceso gratuito por la Puerta del Reloj únicamente a las naves, de lunes a viernes de 8:00 a 9:30 horas
Entrada general: 10 € / Mayores de 65 años: 9 € / Nacidos y/o residentes de Toledo, menores de 12 años y discapacitados: entrada gratuita
https://www.catedralprimada.es/
ALCÁZAR DE TOLEDO
Como les adelanté, el tour también incluía la entrada al Alcázar de Toledo, una fortificación que, gracias a su privilegiada situación sobre una colina, ha sido un enclave militar estratégico muy importante, sobreviviendo a numerosas guerras e invasiones.
Construido como un cuartel del ejército romano en el siglo III, tras la llegada de los visigodos, fue convertido en la capital del reino. Fue recién en el año 711, con la dominación musulmana, que se le llamó Alcázar, que significa “fortaleza” en árabe. Más tarde, durante la Edad Media y bajo el mandato de Alfonso VI, la fortaleza fue embellecida considerablemente, unificando las culturas que habían pasado por ella: árabes, judíos y cristianos.
Cabe destacar que al tratarse de un edificio que ha pertenecido a diferentes culturas, su estilo arquitectónico es variopinto: su fachada occidental es de estilo renacentista, la del este es medieval, con sus torres y defensas cilíndricas, la del norte es gótica plateresca, y la del sur es de estilo churrigueresco o gótico anticlásico.
Actualmente, el Alcázar alberga el Museo del Ejército, además de algunos salones como el Salón de armas blancas, el Salón de armas de fuego, el Salón de maquetas y el Despacho Moscardó, la única sala que se conserva tal y como estaba durante la Guerra Civil.
Sabías que durante el inicio de la Guerra Civil Española (1936-1938), el Alcázar fue utilizado como punto defensivo y de resistencia frente a un asedio de las fuerzas republicanas que duró 70 días, hasta el 28 de septiembre de 1936, cuando fue liberado y visitado al día siguiente por Francisco Franco.
Calle de la Unión, s/n / Autobuses: líneas L11, L61, 621
Martes a domingo: 10:00 a 17:00 horas / Cerrado el 1º y 6 de enero, 1º de mayo, 24, 25 y 31 de diciembre
Entrada general: 5 € / Entrada + Audioguía: 8 € / Menores de 18 años: entrada gratuita / * Entrada gratuita los domingos
https://ejercito.defensa.gob.es/museo/
MONASTERIO DE SAN JUAN DE LOS REYES
Con la tarde por delante continuamos caminando por la ciudad hasta llegar al Monasterio de San Juan de los Reyes, uno de los mejores conjuntos del gótico isabelino, encargado en 1476 por los Reyes Católicos con motivo de su victoria en la Batalla del Toro.
La iglesia se compone de una sola nave con vidrieras que reciben luz natural y paredes repletas de relieves y esculturas. Su capilla mayor es de enorme belleza, con escudos de los Reyes Católicos sostenidos por águilas.
El claustro, por su parte, fue finalizado en 1476 y destaca por sus arcos y sus cuatro alas abiertas que dan a un hermoso patio exterior. En su techumbre policromada se repiten emblemas, armas e iniciales de los Reyes Católicos, ornamentaciones que fueron realizadas en estilo mudéjar.
Calle de los Reyes Católicos, 17 / Autobuses: líneas L61, L62, L92 y L5D
1º de marzo al 15 de octubre: 10:00 a 18:45 horas / 16 de octubre al 28 de febrero: 10:00 a 17:45 horas / Cerrado el 1º de enero y el 25 de diciembre
Entrada general: 3 € / Niños de hasta 10 años y residentes de Toledo que puedan acreditarlo: entrada gratuita
https://www.sanjuandelosreyes.org/
SINAGOGA DE SANTA MARÍA LA BLANCA
Muy cerca de ahí visitamos la Sinagoga de Santa María La Blanca, templo que fue construido a finales del siglo XII, aunque no se conoce la fecha con exactitud.
Funcionó como sinagoga durante más de dos siglos, aunque debido a la revuelta antijudía del 1391 que se inició en Sevilla, fue víctima de saqueo, expropiada y convertida en iglesia finalmente. Hoy en día, aunque pertenece a la iglesia católica, no se realiza culto en su interior y se utiliza para numerosas actividades culturales y educativas.
De estilo mudéjar, una de sus principales características es el contraste entre la sobriedad y austeridad de su exterior, y la extravagancia y belleza arquitectónica de su interior con los capiteles de sus columnas, ornados con piñas y volutas, clara influencia del arte románico.
Calle de los Reyes Católicos, 4 / Autobuses: líneas L5D, L11, L61, L62
1º de marzo al 15 de octubre: 10:00 a 18:45 horas / 16 de octubre al 28 de febrero: 10:00 a 17:45 horas / Cerrado el 1º de enero y el 25 de diciembre
Entrada general: 3 € / Mayores de 65 años: 3 € / Niños de 11 a 14 años: 2,50 €
IGLESIA DE SANTO TOMÉ
Subiendo por estrechas y serpenteantes callecitas llegamos a la Iglesia de Santo Tomé, fundada como parroquia tras la reconquista cristiana de la ciudad por el rey Alfonso VI en el 1085 y que recién a finales del siglo XIV fue reconstruida por el conde Orgaz, quien le añadió su actual campanario cristiano al alminar musulmán.
La torre es un clarísimo ejemplo del arte mudéjar toledano y es el elemento que se preserva de la antigua iglesia primitiva. Conserva sus muros y piezas, que fueron labrados durante la época visigoda.
En cuanto a la Capilla Mayor, las primeras noticias de su construcción datan de 1483. De estilo gótico, actualmente cuenta con un retablo del siglo XIX con pinturas de Vicente López, que habla de la Incredulidad de Santo Tomás, pues el original se perdió.
No obstante, la Capilla de la Concepción es uno de los espacios más importantes pues es el lugar donde el señor Orgaz fue sepultado. Pero además aquí se halla el “El entierro del Conde de Orgaz”, famoso cuadro pintado por el Greco entre los años 1586 y 1588, y que representa un milagro en el que San Esteban y San Agustín bajan de los cielos para enterrar al señor de Orgaz en la iglesia Santo Tomé, debido a su vida de devoción, fe y humildad.
Plaza del Conde, 4 / Autobuses: líneas L5D, L11, L61, L62, L94
1º de marzo al 15 de octubre: 10:00 a 18:45 horas / 16 de octubre al 28 de febrero: 10:00 a 17:45 horas / Cerrado el 1º de enero y el 25 de diciembre
Entrada general: 3 € / Mayores de 65 años: 3 € / Niños de 11 a 14 años: 2,50 €
http://santotome.org/
IGLESIA DE LOS JESUITAS (SAN ILDEFONSO)
Continuando nuestro paseo nos encontramos con la Iglesia de los Jesuitas (San Ildefonso), una espléndida muestra del barroco, con una soberbia fachada de tipo retablo.
Abierta al culto en 1718, en su capilla mayor cuenta con un original retablo pintado al fresco y enmarcado por columnas y marcos pintados en perspectiva, lo que se conoce como trampantojo. Grandes retablos barrocos a cada uno de los lados de la nave central la convierten en un verdadero museo de la escultura que, en muchos casos, narran la historia de la Compañía de Jesús, presente en la ciudad durante siglos.
Enclavada en uno de los puntos más altos de Toledo, desde sus enormes torres gemelas de más de 50 metros de altura se puede disfrutar de la vista más privilegiada de la ciudad medieval y de la imponente Catedral Primada y el Alcázar.
Plaza Padre Juan de Mariana, 1
1º de abril a 30 de septiembre: 10:00 a 18:45 horas / 1º de octubre a 31 de marzo: 10:10 a 17:45 horas / Cerrado: 1º de enero y 25 de diciembre
Entrada general: 3 € / Mayores de 65 años: 3 € / Niños de 11 a 14 años: 2,50 €
MEZQUITA DEL CRISTO DE LA LUZ
Tras sentarnos a almorzar y descansar un rato los pies de tanta caminata, fuimos hasta la Mezquita del Cristo de la Luz, la mezquita mejor conservada de Toledo, de las diez que llegó a tener. Fue construida en el año 999, lo que la convierte en el monumento en pie más antiguo de la ciudad.
Se trata de un espléndido ejemplo de la arquitectura mudéjar e hispano-musulmana en España, cuyo interior se divide en nueve espacios cubiertos por bóvedas nervadas. Sus capiteles visigóticos, que sustentan arcos de herradura, y su cabecera románico-mudéjar del siglo XII, son algunas de las características que la convierten en un espacio mágico, lleno de colores y distintas influencias.
Sabías que en 1889, en la fachada suroeste se descubrió una inscripción que consigna la fecha de la construcción y el nombre de su creador Ahmad ibn Hadidi, con la ayuda de Alá. Estas inscripciones fueron realizadas exclusivamente con fragmentos de ladrillos ordinarios.
Calle Cristo de la Luz, 22 / Autobuses: líneas L5D, L61, L6
1º de marzo al 15 de octubre: 10:00 a 18:45 horas / 16 de octubre al 28 de febrero: 10:00 a 17:45 horas / Cerrado el 1º de enero y el 25 de diciembre
Entrada general: 3 € / Mayores de 65 años: 3 € / Niños de 11 a 14 años: 2,50 €
PLAZA DE ZOCODOVER
Ya terminando nuestro día en la Ciudad de las Tres Culturas, llegamos a la Plaza de Zocodover, centro neurálgico de la ciudad para los toledanos y turistas, donde se encuentran restoranes, bares de tapas y diferentes empresas de guías turísticas.
Según Julio Porres, Zocodover nace como un espacio abierto defensivo en la época romana, ya que es uno de los puntos más altos de la ciudad y se encuentra a escasos metros del Alcázar. Con el paso del tiempo aquí pasó a realizarse el famoso mercadillo del “Martes”, mercadillo semanal donde los toledanos iban hacer sus compras. Este mercado fue instaurado por Enrique IV de Castilla en el siglo XV y se celebró hasta los años 50.
En una visita a Toledo, el rey Felipe II al ver Zocodover manifestó que su estado “ofende a la vista”, por lo que urgió a Juan de Herrera proyectar una plaza rectangular rodeada de soportales, de los cuales llegaron a construirse dos arcos en la subida de Carlos V cerrando así la plaza. Estos arcos ya no existen, pues fueron demolidos para facilitar la circulación de vehículos.
No olvides visitar la estatua de Miguel de Cervantes ubicada en el Arco de la Sangre, junto a la plaza de Zocodover, la cual homenajea al escritor de El Quijote y a la estrecha relación que mantuvo con la ciudad.
Sabías que el nombre de Zocodover tiene origen árabe y significa literalmente “mercado de bestias”, donde se realizaba compraventa de animales del trabajo de carga o tiro. En las fiestas patronales, la plaza era cerrada convirtiéndose en una auténtica plaza de toros y sus balcones se usaban como palcos.
PUENTE DE ALCÁNTARA
Al abandonar Toledo cruzamos el río Tajo por el Puente de Alcántara, uno de los puentes más bonitos de España, cuyos orígenes datan del siglo III, cuando sobre él pasaba la calzada que unía Cesárea Augusta (la actual Zaragoza) con Emérita Augusta (la actual Mérida).
Su nombre se debe a los árabes, quienes tras su llegada a la Hispania, lo restauraron y le dieron el nombre de “al-qantarah”, que significa “el puente”. Los árabes le dieron un uso aún mayor a este estratégico puente, pues también lo utilizaron para unir la ciudad de Córdoba con Zaragoza.
Frente al puente se encuentra la famosa Puerta de Alcántara, construida en el siglo X y también en estilo árabe, y que da acceso al centro histórico de la ciudad.
Sabías que en el siglo X, el puente quedó destruido debido a una fuerte riada, por lo que a mediados del siglo XIII fue reformado construyéndose su famoso torreón occidental, que sirvió como fortaleza y como lugar estratégico para cobrar el “Portazgo”, impuesto del que estaban libres los toledanos y vecinos que habitaban en los montes de los alrededores.
MAPA
CLIMA
Toledo tiene un clima mixto entre el clima mediterráneo y el continental, con inviernos relativamente fríos y veranos muy calurosos y secos. Las temperaturas en verano pueden superar en ocasiones los 40°C, mientras que en invierno pueden bajar algunos grados bajo cero. Asimismo, las diferencias de temperatura en el día son bastante grandes.
Las temperaturas medias máximas en verano son muy calurosas y alcanzan picos de más de 34°C en los meses de julio y agosto. En el mes más frío, enero, la temperatura mínima promedio es de 1.3°C. Las heladas (días con temperaturas bajo cero) son bastante frecuentes y se distribuyen entre noviembre y marzo. Las lluvias, en tanto, son muy escasas y se concentran entre los meses de octubre y diciembre, y entre abril y mayo.
Con todo lo anterior, la mejor época para visitar la ciudad de Toledo son los meses de primavera y otoño, en particular entre abril y junio, y entre septiembre y octubre.
¿CUÁNTOS DÍAS ESTAR?
Si bien te comenté que visitar Toledo por el día viajando desde Madrid es un buen panorama, mi recomendación es que duermas al menos una noche en la ciudad para poder ver sus monumentos milenarios y recorrer sus calles con toda calma.
ALOJAMIENTO
Toledo es una ciudad que destila historia y monumentalidad, lo que la convierte en un destino turístico con una oferta de alojamientos que se adapta a todos las preferencias y presupuestos viajeros.
Sin embargo, el precio es diferente en cada uno de los distritos que la integran, siendo los más caros los del centro histórico, el barrio judío y la zona del Alcázar. Por el contrario, la zona de la estación de tren y el distrito Norte tienen precios mucho más económicos.
Centro de Toledo: Ubicado sobre una colina, comprende el casco antiguo de la ciudad y entre sus empinadas calles se encuentran el Alcázar, la catedral gótica de Santa María, el monasterio de San Juan de los Reyes y los museos de Concilios y la Cultura Visigoda y el de los Templarios. Esto la convierte en la mejor zona para alojarse en Toledo y aunque los precios son altos, estos varían en función de la temporada, siendo más elevados en primavera y otoño.
Zona del Alcázar: Ubicada al este del centro histórico, en el punto más elevado de la ciudad, aquí también se encuentran la popular plaza de Zocodover, desde donde parten líneas de autobús que se desplazan a distintos puntos de Toledo. Aquí también se hallan las pastelerías más señeras de la ciudad, donde puedes comprar típicos mazapanes. La oferta hotelera es ligeramente más económica que en el centro, pero aún así con precios superiores a los que se pueden encontrar fuera de las murallas.
Judería: Se extiende al oeste de la zona amurallada, contigua al casco antiguo, y delimitada por el río Tajo. Se organiza en torno al barrio de Santo Tomé y en sus calles se encuentran las sinagogas de Santa María la Blanca y el Tránsito, el Monasterio de San Juan de los Reyes, la puerta del Cambrón (la más antigua de la ciudad) y la iglesia de Santo Tomé. Es una de las zonas más recomendadas para alojarse en Toledo si buscas dormir en un barrio especial y con encanto, sin estar demasiado lejos del centro. La oferta de hoteles es bastante interesante, aunque los precios son elevados.
Zona de la estación de trenes: Se encuentra al otro lado del río Tajo, en torno a la estación de trenes, por lo que constituye la puerta de entrada a la ciudad, pues tiene conexión por los trenes AVE principalmente con Madrid, desde donde se tarda unos 40 minutos. Esto la convierte en una de las zonas más recomendables para hospedarse en Toledo si llegas en tren o si tienes la intención de desplazarte a otros destinos cercanos. Está cerca del palacio de congresos, por lo que es una buena opción de alojamiento para los viajeros de negocios, y los precios son más económicos que en los barrios más céntricos.
Zona Norte: Este distrito se extiende al norte del casco histórico y el centro moderno, por lo que es una zona aconsejable para los viajeros que buscan más tranquilidad. Aquí se encuentran el circo romano, la plaza de toros y parques como el Crucero y las Tres Culturas. Está comunicado con el centro urbano mediante la línea 1 de bus, que tiene parada en la plaza de Zocodover. La oferta de hoteles no es tan amplia como en otras partes y se concentra principalmente en el barrio de Buenavista.
TRANSPORTE
CAMINAR
Como el centro histórico de Toledo es pequeño se puede recorrer perfectamente a pie. Además, sus callejuelas se aprecian mucho mejor a un ritmo lento, lo que te permite descubrir sus encantos y admirarte con sus principales monumentos.
AUTOBUSES
La red de autobuses de Toledo cuenta con líneas que te permiten llegar a cualquier lado.
El precio del billete sencillo para un trayecto en autobús es de 1,40 €, aunque si vas a utilizarlo a menudo, es recomendable comprar una tarjeta bonobús en la Plaza de Zocodover, la cual puedes ir recargando con 5, 10 o 20 €. Cada vez que utilices la tarjeta, se descuentan 0,64 €, por lo que esta opción es sumamente recomendable si planificaste el viaje mediante combinaciones de autobuses.
BICICLETAS
Una buena opción para recorrer Toledo es alquilando una bicicleta. Hay varios paseos por el Tajo, por los cerros y las montañas que puedes hacer para conocer la ciudad desde otros puntos de vista.
Existe un paseo de 15 kilómetros que recorre la ciudad de punta a punta, desde el Puente de Alcántara hasta el Puente de San Martín. Otra ruta te lleva desde la Puerta Bisagra de Toledo hasta el castillo de Amonacid, un hermoso e imponente castillo de origen musulmán que servía de vigilancia a un antiguo camino a La Mancha.
La Vía Verde de la Jara es una preciosa ruta de 52 kilómetros que recorre la antigua línea de ferrocarriles que conectaba Calera y Chozas y Santa Quiteria, en la cual puedes disfrutar del Tajo, la flora y la fauna del lugar, y de senderos y lugares súper relajantes.
Ahora, si lo que te interesa es recorrer el centro histórico, es importante que tengas en cuenta que hay zonas en las que no resulta cómodo andar en bici debido al empedrado, a los escalones y a la irregularidad y poca amplitud de sus callejuelas.
TAXIS
Si bien Toledo es una ciudad perfecta para moverse a pie o en bicicleta y además está muy bien conectada por los austobuses, siempre hay momentos en los que es más cómodo moverse en taxi. En esos momentos, no te será difícil encontrar taxis en la ciudad, ya sea en la calle o pidiendo uno por teléfono. Ahora bien, ten en cuenta que, como en todas las ciudades, la opción de moverse en taxi por Toledo es la más cara.
Las tarifas son: Bajada de bandera: 1,80 €; por cada kilómetro recorrido: 1,05 €; carrera mínima: 3,90 €; hora de espera: 13,50 €. Estos precios se ven incrementados en horario nocturno y en días festivos.
CONSEJOS
- Consigue un buen mapa. Si bien Toledo es una ciudad pequeña, sus calles serpenteantes hacen que sea complicado ubicarse, lo que se facilita si tienes un mapa a mano.
- Lleva calzado cómodo. La ciudad se recorre a pie y como las calles son antiguas y empredradas, es importante que camines con comodidad.
- Si quieres llevarte un recuerdo de Toledo, los más comunes entre los turistas son las cuchillas y las espadas de producción local, aunque piensa si podrás embarcarlas en tu avión posteriormente. Otro souvenir interesante son las cerámicas de loza pintada y azulejos de Talavera de la Reina (otra ciudad de la provincia) que son de la más alta calidad y son reconocidas en todo el mundo. También de otra localidad, en este caso de Lagartera, son los encajes, puntillas y bordados hechos a mano.
- En restoranes y cafés se acostumbra dejar una propina del 10% del total por el buen servicio.
- El comercio abre a más tardar a las 9:00 am y cierra entre las 7 y 8 de la tarde. El domingo es día libre.
- No dejes que te timen, engañen o roben. Como en cualquier ciudad del mundo con gran afluencia de turistas, siempre hay algunos que intentan aprovecharse de la falta de planificación o confianza de las personas.
- Aunque Toledo es una ciudad muy segura, siempre debes tener cuidado con tus pertenencias, sobre todo en lugares en los que hay mucha gente. Puede haber carteristas en las calles principales (Zocodover, Calle Comercio, Santo Tomé) en momentos puntuales como los días festivos.
- Piérdete por las callejuelas, los cobertizos y los conventos, especialmente de noche. Toledo por la noche tiene un encanto especial, pues su iluminación en contraste con sus viejas piedras, envuelven la ciudad bajo un halo de misterio que podrás descubrir si la recorres cuando ya ha oscurecido.
