Llegamos al terminal de buses de Tallin a eso de las 9:15 de la noche, después de más de 4 horas de viaje desde Riga. Aún con luz solar, tomamos un taxi que nos llevó hasta nuestro hotel en el casco histórico, el Olevi Residents.
El edificio del hotel, pese a ser remodelado en 2003, data del siglo XIV, por lo que no es de extrañar que no existiera ascensor y tuviéramos que subir con nuestras maletas a cuestas hasta el sexto piso, donde estaba nuestra habitación, pasando por una estrecha escalera de caracol y por pintorescos entrepisos llenos de adornos medievales. Así que si bien se trata de un hotel pintoresco y bien ubicado, la verdad es que no lo recomiendo por las incomodidad de tener que subir tantas escaleras y por lo básico de los servicios que ofrecen.
LOS LUGARES QUE DEBES VISITAR
PLAZA DEL AYUNTAMIENTO / AYUNTAMIENTO
Después de instalarnos, nos fuimos a recorrer la ciudad, partiendo por la Plaza del Ayuntamiento o Raekoja Plats, el corazón de Tallin, donde antiguamente tenía lugar el mercado y que hoy, es el punto de encuentro más habitual entre los estonios. Dominando la plaza está el gran edificio del Ayuntamiento, construido en piedra caliza entre 1402 y 1404, del cual resalta su torre octogonal que lo hace parecer más una iglesia.
En su fachada, llaman especialmente la atención unos dragones que escupen el agua de lluvia cuando son incapaces de retenerla. Y en lo más alto, desde 1530, el Viejo Tomás, símbolo y vigilante de Tallin, custodia la ciudad desde su veleta. Por cierto, actualmente, es el único ayuntamiento de estilo gótico que se conserva en el Norte de Europa, y se mantiene intacto desde su construcción, motivo más que suficiente para visitarlo.
La plaza está rodeada de casitas de colores que funcionan como restaurantes y cafés, que para ser noche de jueves se encontraban llenas de turistas y locales disfrutando de unas cervezas y algo de comer. La vista en 360 grados de la plaza es magnífica tanto por su colorido, como por parecer anclada en otro tiempo.
Sabías que en el centro de la plaza hay una piedra marcada con una rosa de los vientos. Desde este punto, con un poco de estiramiento y flexión, se pueden ver las puntas de las cinco agujas de la Ciudad Vieja.
PLAZA DE LA LIBERTAD
Luego, caminando por la calle Harju llegamos hasta la Plaza de la Libertad, una enorme explanada de 110 por 75 metros, diseñada por los arquitectos Tiit Trummal, Veljo Kaasik y Andres Alver en 2009 y que está bordeada por la iglesia de San Juan, el bulevar Kaarli y un centro comercial subterráneo, y por la Columna de la Victoria, una cruz de hormigón recubierta con paneles de vidrio y luces LED, que conmemora la Guerra de Independencia de Estonia entre 1918 y 1920.
Cansados y con hambre, pasamos a Linnutee Puhvet, uno de los pocos locales que seguía abierto a esa hora, donde comimos unas exquisitas hamburguesas a la parrilla. ¡Nada mejor para terminar el día! De regreso en el hotel, nos dormimos pronto y no despertamos hasta el día siguiente con el ruido de la lluvia.
FARMACIA DEL AYUNTAMIENTO (RAEAPTEEK)
Luego de tomar desayuno en el hotel, nos dirigimos hasta el número 11 de la Plaza del Ayuntamiento para conocer la Farmacia del Ayuntamiento (Raeapteek), que se dice es la farmacia más antigua de Europa, en funcionamiento desde 1422. Diez generaciones de la familia Burcharts la operaron desde 1581 hasta 1911.
En sus tiempos esta farmacia fue tan famosa que el zar ruso solía pedir medicamentos aquí. Entre los remedios que se vendían en la época medieval estaban la poción de piel de serpiente, jugo de momia y cuerno de unicornio en polvo (para la potencia masculina); aunque también se podían comprar artículos de uso diario como mermelada, té, vino, pólvora y, lo más importante, mazapán, uno de los productos más vendidos y que según la leyenda local, se inventó aquí como curativo en el siglo XV.
La verdad es que se trata de un verdadero museo farmacéutico, con muebles, libros de medicina, balanzas y cajas registradoras antiguas,
además de cientos de frasquitos de porcelana y otros mucho menos ortodoxos, sobre todo en lo que a su contenido se refiere. Claro, porque tienen gusanos, arañas, serpientes, erizos y otras criaturas que se usaban para preparar ungüentos en la época medieval, con propiedades curativas más supersticiosas que reales. Sin duda, un lugar digno de visitar, ya que es como entrar en un túnel del tiempo.
Descubre la Ciudad Vieja de Tallin, declarada Patrimonio de la Humanidad, con este paseo guiado en español.
Raekoja plats 11
Lunes a sábado: 10:00 a 18:00 horas
Entrada gratuita
http://www.raeapteek.ee/en/
IGLESIA DE SAN NICOLÁS
Después visitamos la Iglesia de San Nicolás, patrono de los pescadores y marineros. Construida en 1230 por comerciantes alemanes de la isla de Gotland, sobrevivió al saqueo de la Reforma de 1523, pero no tuvo tanta suerte en el siglo XX cuando fue destruida por las bombas de la Segunda Guerra Mundial.
Desde su restauración en la década de los 80, la iglesia ha funcionado como un museo especializado en obras de arte religioso, por lo que en su interior pueden verse hermosos retablos, candelabros barrocos y losas funerarias centenarias, mientras que en la Cámara de Plata se encuentran impresionantes obras de miembros de los gremios de artesanía de la ciudad.
Sabías que la acústica de la iglesia la convierte en un excelente lugar para conciertos, con actuaciones de órgano o coros que se celebran la mayoría de los fines de semana.
Niguliste 3
Mayo a septiembre: Lunes a domingo: 10:00 a 18:00 horas / Octubre a abril: Lunes a domingo: 10:00 a 17:00 horas / * Boletería abierta hasta media hora antes del cierre
Adultos: 6€ / Niños: 5€
https://www.nigulistemuuseum.ekm.ee/en/
KIEK IN DE KÖK / MURALLA DE TALLIN / JARDÍN DE DINAMARCA
Caminamos hasta uno de los bastiones mejor conservados, el Kiek in de Kök, situado en la subida a la colina de Toompea. Esta torre defensiva data de 1475, tiene 38 metros de altura y sus paredes un grosor de aproximadamente 4 metros. En sus muros todavía son visibles algunos cañonazos que recibió durante la Guerra de Livonia, a finales de 1500. La torre también es el punto de partida para el fascinante sistema de túneles ocultos (los Túneles del Bastión) que se encuentran debajo de la antigua muralla de la colina de Toompea.
Komandandi tee 2
1º de octubre al 30 de abril: Martes, miércoles, viernes, sábado y domingo: 10:00 a 17:00 horas / Jueves: 10:00 a 20:00 horas / 1º de mayo al 30 de septiembre: Lunes a domingo: 10:00 a 18:00 horas
Información de precios en: https://linnamuuseum.ee/en/kiek-de-kok/visitor-info/
https://linnamuuseum.ee/en/kiek-de-kok/
Si se continúa el paso, se comienza a ver gran parte de la muralla que protegía la ciudad. De los 2,4 kilómetros que tenía en el siglo XVI, prácticamente dos de ellos se conservan en perfectas condiciones, lo que hace que Tallin posea uno de los sistemas fortificados mejor preservados de toda Europa. ¡Increíble!
La muralla fue construida en distintas fases entre los siglos XIII y XVI y en su apogeo llegó a contar con 46 torres, de las que se han conservado 25, entre las que destaca (muy cerca de Kiek in de Kök) la Neitsitorn, erigida en el siglo XIV, que con su planta cuadrada, fue llamada “Torre de la Doncella” por haber sido empleada como cárcel para prostitutas. En la actualidad alberga un café muy frecuentado por los turistas.
A su lado está el Jardín del Rey de Dinamarca, un precioso jardín de terrazas escalonadas, donde según la leyenda, acamparon en el año 1219, las tropas del rey de Dinamarca antes de la toma de Toompea. Está lleno de estatuas de monjes que dan al lugar un toque misterioso.
CATEDRAL DE ALEXANDER NEVSKI
Paseando por la colina, llegamos hasta la Catedral de Alexander Nevski, inaugurada en el año 1900 como un símbolo de la dominación del imperio de los Zares sobre Estonia. Su llamativo exterior destaca por sus 5 cúpulas con forma de cebolla, mientras que su interior tampoco pasa desapercibido con sus coloridos mosaicos, pinturas y frescos.
Diseñada por el respetado arquitecto de San Petersburgo, Mikhail Preobrazhenski, la catedral fue dedicada al príncipe Alexander Nevski, quien dirigió la famosa batalla del hielo en el lago Peipsi en 1242, que detuvo el avance hacia el este de los cruzados alemanes. Declarada Patrimonio de la Humanidad en 1997, las torres de la catedral sostienen un conjunto de 11 campanas, incluida la más grande de Tallin, que pesa 15 toneladas.
Sabías que esta hermosa catedral estuvo a punto de ser demolida en 1924, ya que los estonios consideraban que era un recuerdo de la época oscura de la ciudad, aunque por suerte, se mantuvo en pie y en 1991 fue restaurada.
Lossi plats 10
Lunes a sábado: 10:00 a 18:00 horas
Entrada gratuita
http://tallinnanevskikatedraal.eu/?lang=en
PARLAMENTO DE ESTONIA (CASTILLO DE TOOMPEA) / PIKK HERMANN
Justo enfrente de la catedral se encuentra el antiguo Castillo de Toompea que hoy en día alberga el Parlamento de Estonia. Fue construido durante los siglos XIII y XIV, y más tarde, fue conquistado por los daneses. Desde entonces, ha pasado por manos danesas, suecas y rusas.
El edificio del parlamento, de color rosado y estilo barroco, está construido sobre tres de las torres medievales y fue mandado levantar por Catalina la Grande en 1773. A un lado del Parlamento está el Jardín del Gobernador (Kuberneri aed), desde donde se puede ver la torre Pikk Hermann, ubicada en la esquina sur-oeste del castillo y cuyo nombre viene del alemán “Lange Hermann”, que significa algo así como jefe y hace referencia a un héroe medieval.
La torre, de 46 metros de altura, fue construida en 1371 y en su parte superior, ondea la bandera que simboliza la soberanía de Estonia. Los colores azul, blanco y negro del emblema nacional fueron vistos por primera vez aquí el 12 de diciembre 1918 y después de años de ocupación soviética, de nuevo el 24 de febrero de 1989.
Con este tour gratuito, descubre el precioso casco medieval de Tallin y su gran conjunto de iglesias, torres y castillos.
CATEDRAL DE SANTA MARÍA (TOOMKIRIK)
Volviendo hacia el norte por la calle Toom-Kooli nos encontramos con la Catedral de Santa María o Toomkirik, construida a partir de 1230. Originalmente estaba dedicada a la Virgen María y desde la reforma protestante se convirtió en la sede de la Iglesia Luterana Estonia.
El aspecto actual de la iglesia es el resultado de las numerosas reformas a la que ha sido sometida. La decoración barroca de su interior fue añadida en 1684 tras el incendio de Toompea, mientras que la torre con su aguja barroca se levantó en 1779. Su interior está lleno de escudos heráldicos y lápidas, una de las cuales pertenece a Otto Johann Thuve, “Don Juan de Tallin”, cuyo último deseo fue enterrarse cerca de la entrada, para que las personas que estuvieran entrando en la iglesia, pudieran orar por sus pecados.
Toom-Kooli 6
1º de enero al 30 de marzo: martes a sábado: 10:00 a 16:00 horas / Domingo: 09:00 a 16:00 horas / 1º al 30 de abril: martes a viernes: 10:00 a 17:00 horas / Sábado y domingo: 09:00 a 17:00 horas / 1º al 31 de mayo: lunes a domingo: 09:00 a 17:00 horas / 1º de junio al 31 de agosto: lunes a domingo: 09:00 a 18:00 horas / 1º al 30 de septiembre: lunes a domingo: 10:00 a 17:00 horas / 1º al 31 de octubre: martes a domingo: 09:00 a 16:00 horas / 1º de noviembre al 31 de diciembre: martes a sábado: 10:00 a 16:00 horas / Domingo: 09:00 a 16:00 horas
Entrada: 2€
http://toomkirik.ee (en estonio)
MIRADOR PATKULI
Con algo de frío, caminamos hasta el café Fersen, una acogedora cafetería decorada con estilo medieval, ubicada bajando unas estrechas escaleras en la calle Rahukohtu. En medio de paredes de piedra y bancos y mesas de madera, bebimos nuestro café, recompusimos energías y continuamos con nuestro paseo al mirador Patkuli, desde donde según yo, se tienen las mejores panorámicas de Tallin. Desde aquí es posible ver toda la parte vieja de la ciudad y sus murallas, además de las torres de las principales iglesias.
Bajando por unas escaleras a un lado del mirador se observa la casa Stenbock, un prominente edificio de estilo neoclásico que es la sede oficial del Gobierno de Estonia. Desde aquí llegamos a la estación del Báltico, la estación central de Tallin, desde la que salen trenes a San Petersburgo y Moscú, así como servicios de cercanías y larga distancia a ciudades estonias como Tartu o Narva.
TOOMPARK
Luego, paseamos por el Toompark, un parque desarrollado en lo que fue la antigua fortificación alrededor del estanque Shnelli, que a su vez, es la única parte sobreviviente del foso que alguna vez rodeó la ciudad y que recibe su nombre por el jardinero de la ciudad, cuyo jardín y casa estaban situados aquí en el siglo XIX.
En 1903 se abrieron las escaleras que unen el mirador Patkuli con el parque, conectando el casco antiguo superior con el inferior, tiempo en que también se reconstruyó el resto del parque. Años después, se construyó una fuente poligonal en el estanque y se estableció un jardín alpino.
PUERTA DE VIRU / CALLE VIRU
Por el bulevar Kaarli y posteriormente, por la avenida Pärnu, llegamos hasta la Puerta de Viru, nombre con el que se conoce a las dos emblemáticas torres circulares construidas en el siglo XIV, que servían de entrada a los viajeros por el flanco más oriental de la ciudad medieval.
Sabías que la mayor parte de la puerta se derribó en la década de 1880 para hacer espacio para el tráfico, pero estas dos torres se mantuvieron y desde entonces se han convertido en un símbolo de la ciudad.
Cruzando la “puerta”, casi recta hasta la Plaza del Ayuntamiento, se extiende la calle Viru, una de las preferidas de los turistas y locales, que la repletan a todas horas aprovechando la gran cantidad de cafés, restoranes y tiendas que hay a lo largo de ella.
RESTAURANT OLDE HANSA
Al final de la calle nos topamos con el famoso restaurant Olde Hansa, nombre que significa la “vieja casa” y que representa una taberna medieval recreada en cuerpo y alma. Y es que no solo es estar en un edificio del siglo XVI, sino que hay que sumar que las luces son velas y antorchas, te debes lavar las manos en palanganas, los camareros van disfrazados de época, te dan un menú en una especie de pergamino o puedes elegir platos que sólo podrías encontrar en la Edad Media, muchos de ellos a base de distintas carnes procedentes de la caza.
Nosotros escogimos chucrut cocido con jamón y carne de vacuno, que venía acompañado de arándanos y una masita como de empanada, y para beber unas cervezas con miel. Al terminar, como veía a las meseras pasar con unos jarritos de los que asomaba mucha crema, se me ocurrió pedir uno… resultó ser un café con coñac y crema, mucha crema…
Y aunque sus menús no son demasiado “estonios” y que puede ser un poco caro, darte un capricho para vivir una experiencia puramente medieval, merece la pena. No obstante, debes tener en cuenta que suele haber mucha demanda, sobre todo en los días de verano cuando miles de personas desembarcan de los cruceros que recorren el Báltico.
Un tip es que les pidas a los promotores vestidos de época que se ubican en la puerta, una de las fichas para tomar un licor de frutas gratis. Puedes mostrar esta moneda cuando estés comiendo y probar esta bebida.
Vana turg 1
Lunes a domingo: 11:00 a 00:00 horas
https://www.oldehansa.ee
IGLESIA DEL ESPÍRITU SANTO
Con el estómago lleno, decidimos quemar las calorías del almuerzo subiendo al mirador en la torre del Ayuntamiento. Por 4 euros y luego de trepar los 115 escalones, pudimos gozar de las mejores vistas de la plaza y de la ciudad antigua.
Raekoja plats 1
1º de junio al 31 de agosto: Lunes a domingo: 11:00 a 18:00 horas (última admisión a las 17:30)
Adultos: 4€ / Menores de 16 años: 2€
http://raekoda.tallinn.ee/town-hall
Antes de regresar al hotel para dormir una siesta, nos detuvimos en la iglesia del Espíritu Santo, un templo de estilo gótico construido en el siglo XIII, que lo convierte en el edificio religioso más antiguo de Tallin. En su fachada está el reloj público más antiguo de Estonia y data del siglo XVII. En su interior de doble nave, destaca un interesante retablo pintado y tallado de madera policromada, obra de Bernt Notke.
Pühavaimu 2
14 de enero al 15 de marzo: Lunes a viernes: 12:00 a 14:00 horas / Sábado: 10:00 a 16:00 horas / 16 de marzo al 30 de abril: Lunes a viernes: 10:00 a 15:00 horas / Sábado: 10:00 a 16:00 horas / 1º de mayo al 30 de septiembre: Lunes a sábado: 9:00 a 18:00 horas / 1º al 30 de noviembre: Lunes a viernes: 10:00 a 14:00 horas / Sábado: 10:00 a 16:00 horas / 1º al 13 de enero: Lunes a sábado: 9:00 a 18:00 horas
Adultos: 1,5€ / Niños: 1€
https://www.puhavaimu.ee (en estonio)
Muy cerca del hotel, en el número 26 de la calle Pikk, está la Casa de los Cabezas Negras, hermandad que surgió en el año 1399 y que agrupaba a los comerciantes extranjeros residentes en Tallin y los jóvenes comerciantes locales antes de ser admitidos en el gremio de los Grandes. Ya al atardecer decidimos volver al mirador Patkuli para tener las mejores fotografías de la puesta de sol sobre la ciudad. Un panorama que tienes que incluir si visitas la ciudad.
IGLESIA DE SAN OLAF
Un hermoso día de sol nos sorprendió a la mañana siguiente, cuando enfilamos hacia la iglesia de San Olaf, construida en 1267 y que con los 159 metros de su gigantesca aguja, fue el edificio más alto del mundo entre 1549 y 1625, hasta que un rayo alcanzó su campanario. De hecho, a lo largo de su historia, los rayos golpearon la aguja repetidamente, quemando completamente la estructura tres veces.
Actualmente, su puntiaguda torre se empina hasta los 124 metros y desde su mirador, a 60 metros es posible tener una vista de la ciudad en 360 grados. Eso sí hay que pagar 3 euros y subir nada menos que 258 peldaños.
Sabías que durante la ocupación soviética de Estonia entre los años 1944 y 1991, la torre de la iglesia fue utilizada por la KGB como torre de radio y vigilancia aprovechando su altura y situación estratégica.
Lai 50
Abril, mayo, junio, septiembre y octubre: Lunes a domingo: 10:00 a 18:00 horas / Julio y agosto: Lunes a domingo: 10:00 a 20:00 horas
Adultos: 5€ / Niños: entrada gratuita
http://oleviste.ee
PASAJE SANTA CATALINA / PATIO DE LOS MAESTROS
Después nos fuimos hasta otro de los puntos obligados de la ciudad, el pasaje Santa Catalina, un pintoresco callejón que se encuentra detrás de lo que solía ser la Iglesia de Santa Catalina y que conecta la calle Vene con la calle Müürivahe. Pero lo que hace especial a este pasaje es la serie de talleres de artesanía donde los artistas usan métodos tradicionales para crear y vender artículos de vidrio, sombreros, colchas, cerámicas, joyas, seda pintada a mano y otros artículos. Los talleres están ubicados en habitaciones pequeñas del siglo XV al XVII y se organizan en un estudio abierto donde puede verse a los artistas trabajar, ya sea soplando vidrios, tejiendo o moldeando cerámica.
No muy lejos de allí, otro de los tesoros escondidos de Tallin: el Patio de los Maestros, un lugar que esconde varios talleres artesanales que ofrecen hermosos y originales productos. Finalmente, almorzamos en el restaurant Clayhills Gastropub en la calle Pikk, pasamos a buscar nuestras maletas al hotel y nos fuimos al terminal de cruceros, para tomar el ferry a Helsinki.
Disfruta de unas vistas privilegiadas de la ciudad con este paseo en barco por la bahía de Tallin.
El barco de la Eckerö Line Ferry salió puntualmente a las 6 y media de la tarde. Sentados en la cubierta, ni el Sol lograba aplacar el frío de la gélida brisa marina, mientras cientos de personas bebían cervezas animadamente. Navegando por el Golfo de Finlandia, la silueta de la hermosa capital báltica con sus bastiones e iglesias iba quedando atrás.
MAPA
CLIMA
El clima en Tallin tiene sus estaciones bastante diferenciadas, con inviernos fríos y veranos calurosos y soleados. Las lluvias están presentes durante todo el año. El invierno es muy frío y oscuro con pocas precipitaciones. Las temperaturas promedio durante esta época oscilan entre los -2° y -3°C y suele nevar bastante. Mientras tanto, los veranos son cálidos, con muchas horas de sol, pocas lluvias y con temperaturas que varían entre 18° y 20°C aunque puede darse el caso de llegar hasta 30°C.
Por eso, la mejor época para visitar Tallin es durante la primavera, fresca y con pocas lluvias, tiempo en en que además, las horas de luz solar aumentan, al igual que el horario de sus atracciones.
QUÉ Y DÓNDE COMPRAR
Estonia no se caracteriza por tener una gran tradición culinaria, aunque hay algunos productos típicos que pueden ser un buen regalo. Cuando Tallin se unió a la federación comercial de la Liga Hanseática, allá por el siglo XIII, se convirtió en una rica ciudad de mercaderes. Así que aquí te cuento algunas cosas que puedes comprar tradicionales y típicas de Estonia.
El Chocolate Kalev de Tallin es el regalo ideal para quienes aman este dulce. Kalev se fundó en 1806 en el corazón de Tallin, donde hoy se encuentra el Café Maiasmokk. Su variedad de chocolates y bombones, algunos rellenos de frutos secos y bayas, resultan perfectos para regalar. De la misma casa existe también una bonita cafetería-tienda y un peculiar museo del mazapán.
Y hablando de mazapán, la leyenda estonia dice que el mazapán fue inventado en la Farmacia del Ayuntamiento, que por cierto, lleva funcionando varios siglos. La historia dice que un concejal de la ciudad cayó enfermo y llamó a la farmacia para pedir una cura. El farmacéutico mandó a un aprendiz llamado Mart a hacer el remedio. Éste reemplazó los ingredientes amargos por otros dulces. Así, la mezcla dulce parecida al pan empezó a conocerse como Mardileib o pan de Mart.
Un producto que los estonios consideran verdaderamente local es el “Kama”, una mezcla de harinas molidas, formado por centeno, avena, cebada y guisantes tostados, y que suele tomarse mezclado con leche, kéfir o suero de mantequilla.
Un licor es siempre una buena opción, tanto si es para regalar o una forma de recordar tu viaje a Tallin. El “Vana Tallinn”, cuyo nombre significa “Viejo Tallin”, es un licor que se considera bebida nacional del país. Tiene un sabor dulce y es bastante fuerte (con un grado de alcohol de 40% a 50%) y se toma solo o mezclado en el café. Además del original, existen otras versiones con naranja, chocolate o crema de vana tallinn.
Otro producto típico de Estonia es la lana. Y es que el invierno en Tallin es muy frío, por lo que es muy común encontrar gorros, bufandas, sweaters y calcetines de lana con los patrones tradicionales de las distintas regiones del país. Eso sí, la recomendación es tener la precaución de revisar la etiqueta y verificar que fueron hechos a mano, para que no te pasen gato por libre.
Por último, son especialmente curiosas las antigüedades de la época soviética, como pasaportes de la antigua URSS y todo tipo de material militar. También hay arte, muebles, y otros elementos decorativos. El Mercadillo de Jaama Turg, situado al lado de la estación de tren Balti Jaama, es un buen sitio para encontrar este tipo de artículos.
Por cierto, en el pasaje de Santa Catalina (Katariina käik) hay antiguos talleres donde aún se elaboran artesanías. El Patio de los Maestros, en tanto, alberga varias tiendas y talleres de artistas de madera, cerámica, joyería, cristal y distintas artesanías.
QUÉ Y DÓNDE COMER
La gastronomía estonia recibe una gran influencia de la cocina de otras regiones como la alemana, la rusa y la escandinava. En Estonia, el pescado es el protagonista de la mayoría de los platos, pues además de tener acceso al mar Báltico, hay una multitud de ríos y lagos.
Además, la mitad del territorio del país está cubierto de bosques y un tercio con tierras de cultivo, por lo que existe una gran cantidad de cultivos agrícolas y hortícolas y productos pecuarios.
La patata es otro ingrediente estrella, junto con la rutabaga y el nabo. Si los estonios tienen un alimento antiguo, tradicional y único en la región es la harina de kama que es una mezcla de granos (harina de guisantes, centeno, avena y cebada), que se utiliza para preparar postres. Y por supuesto, los estonios son amantes de la cerveza, pero también son productores de otras bebidas como el vodka o licores de hierbas.
Algunos de los platos más típicos de Estonia son “Keel hernestega”, un aperitivo que se sirve frío y que tiene lengua como principal ingrediente; “Marineeritud angerjas”, anguila marinada que se sirve fría, a menudo acompañada de una ensalada mixta; y “Silgusoustt”, un pequeño arenque que se pesca en el mar Báltico y que se sirve con tocino crujiente y una salsa dulce.
También está el “Mulgikapsad”, una preparación en base a cerdo, patatas hervidas y chucrut; el “Sült”, un cocido hecho con carne de cerdo; el “Verivorst”, un embutido de color oscuro sin carne, producido principalmente con sangre coagulada y arroz, que es un plato estonio típico de invierno y muy especial de la noche de Navidad, el que se sirve acompañado de una jalea roja de frutos silvestres; y el “Rossolye”, un plato típico y famoso de Estonia, consistente en una ensalada de arenque y remolacha en salsa agridulce.
Por otro lado, está el “Karask” es el pan típico de Estonia; y el “Vaesed rüütlid”, que significa “caballeros pobres”, un postre hecho con pan, similar a las tostadas francesas. Por último, el “Kali” es una bebida fermentada dulce y muy suave.
- Olde Hansa (Vana turg 1): Se trata de un restaurant ambientado como una taberna medieval del siglo XV. Aquí puedes probar su carne asada y sus vinos rodeado de coloridos murales del medievo, música de ambiente, luz únicamente de velas y camareros que visten trajes de la época.
- III Draakon (Raekoja plats): Situado en el edificio del Ayuntamiento, este lugar es toda una leyenda de Tallin, ya que parece que estuvieras regresando a la Edad Media, rodeado de mesas y sillas de madera, camareras con atuendos medievales y a la luz de las velas. Y todo esto en un local en el mismísimo edificio del ayuntamiento. Prueba las famosas empanadillas y la sopa de alce.
- Kaerajaan (Raekoja Plats 17): Este restaurant toma su nombre de una canción y baile folk que va en consonancia con la decoración del local que resalta el bagaje étnico y las raíces estonias. Sirven cocina moderna estonia con gran inventiva y colorido.
- Beer House (Dunkri 5): Un sitio genial y rústico, donde se puede tomar una cerveza de producción propia y degustar platos típicos de Estonia, sopas y carne.
- Hell Hunt (Pikk 39): Abierto en 1993, el primer pub de Tallin es un clásico de la ciudad tanto para locales como para turistas. Una buena opción si te gusta la comida de pub: hamburguesas, fish and chips, algunos platos de pasta y aperitivos.
- Kompressor (Rataskaevu 3): Aquí los protagonistas son los crepes, pero en versión rusa, o sea de masa mucho más gruesa. Puedes rellenarlos con cualquier cosa que puedas imaginar, tanto dulce como salado. Lo mejor es que casi todos cuestan menos de 5€.
- Lido (Estonia puiestee 9, Centro Comercial Solaris): Parte de la franquicia de comida letona, aquí puedes elegir entre una gran variedad de platos, pagando según el peso y precio por 100 gramos de lo que hayas elegido.
ALOJAMIENTO
Ciudad Vieja: El casco antiguo de Tallin es la ciudad medieval mejor conservada del norte de Europa y donde se concentran gran parte de sus atractivos. Así que, sin lugar a dudas, ésta es la mejor zona donde alojarse, ya que hay un montón de restoranes, supermercados y tiendas de souvenirs. Eso sí, aunque la capital estonia no es una ciudad excesivamente cara, la ciudad vieja es la zona más cara donde alojarse en Tallin.
Centro de Tallin: Ubicado al sureste de la ciudad vieja, es el centro comercial y económico de la capital estonia, y se encuentra a menos de 10 minutos a pie del casco histórico, por lo que resulta una muy buena opción. Aquí hay una buena variedad de hoteles de las grandes cadenas, restoranes, centros comerciales y otras comodidades.
Puerto de Tallin: Si vas a visitar la ciudad un fin de semana o te escaparás por el día en un ferry desde Helsinki o San Petersburgo, dormir cerca del puerto es lejos la mejor opción. Hay algunos hoteles modernos a precios muy económicos, así que si llegas cansado del viaje, podrás estar en pocos minutos en tu alojamiento. Además, estarás en el centro de la ciudad vieja en apenas unos 15 a 20 minutos caminando.
Kalamaja: Es una de las zonas más de moda donde alojarse. Se trata de un barrio famoso por sus casas de madera y sus tranquilos cafés con ambiente bohemio, muy bien comunicado en transporte público con el corazón de Tallin. Hay bastante oferta de alojamientos, aunque predominan las casas vacacionales y apartamentos.
TRANSPORTE
El centro de Tallin es muy compacto y es fácil recorrerlo y llegar a cualquier punto. La red de transporte público es gestionada por las empresas Tallinna Linnatranspordi AS (buses, tranvías y trolebuses) y MRP Linna Liinid OÜ (con 11 líneas de buses a cargo).
La red de transporte público cuenta con una tarifa única sin importar la distancia recorrida. Existen tickets sencillos y abonos diarios: Billete sencillo comprado a bordo al conductor (2€), Billete de 1 hora (3€), Abono ilimitado de 1 día (3€), 3 días (5€) y 5 días (6€). Los billetes sencillos se compran directamente al conductor. Estos tickets son válidos únicamente para el viaje en el que fueron comprados.
Por su parte, los abonos de 1 hora, 1 día y 3 días permiten ilimitados viajes dentro el período de validez. Para poder usarlos se requiere comprar la tarjeta plástica “Ühiskaart” de color verde que cuesta 2 euros (recuperables) y que se recarga con la cantidad de dinero que se necesite. La tarjeta se puede comprar en cualquier R-Kiosk o en las oficinas de correo.
AUTOBUSES
La red de autobuses de Tallin está compuesta por 73 rutas, identificadas por el número de ruta que va del 1A al 73. Los buses operan desde las 5:00 hasta las 00:00 horas y su frecuencia varía entre 4 a 30 minutos, dependiendo de la ruta, el día y la hora. La línea 2 conecta el centro histórico de Tallin con el Aeropuerto Internacional en aproximadamente 16 minutos.
TRANVÍAS Y TROLEBUSES
La red de tranvías se compone de 4 rutas, identificadas con los números de ruta 1, 2, 3 y 4. Los tranvías operan desde las 5:00 hasta la 23:50 horas y la frecuencia varía entre 4 a 30 minutos, dependiendo de la ruta, el día y la hora. La línea 4 conecta el centro histórico de Tallin con el Aeropuerto Internacional de Tallin en aproximadamente 16 minutos.
En tanto, la red de trolebuses está compuesta por 4 rutas, identificables por los números 1, 3, 4 y 5. Los trolebuses operan desde las 5:10 hasta las 23:45 horas y la frecuencia varía entre 9 y 20 minutos, dependiendo de la ruta, el día y la hora.
BICICLETA
Las bicicletas son una buena opción si quieres visitar algunos de los barrios periféricos más interesantes, dar un paseo junto al mar o explorar parques, playas y bosques de la ciudad.
TAXIS
Las paradas de taxi por lo general se encuentran cerca de los grandes hoteles y en los cruces de las calles más importantes. Hay diferentes compañías de taxis y cada una tiene sus propias tarifas. Aunque las tarifas deben estar en un lugar visible, conviene preguntar antes por el precio del trayecto que para evitarse sorpresas. La tarifa nocturna puede costar en torno a un 20% más que la diurna. Como referencia la bajada de bandera tiene un costo de 5,50€, el precio por kilómetro es de 1,10€, mientras que el precio por hora de espera es de 24,20€.
CAMINAR
Tallin es una ciudad pequeña y muy compacta, por lo que la forma más fácil de llegar a la mayoría de los lugares, sobre todo en el casco antiguo y el centro de la ciudad, es a pie.
TIPS VIAJEROS
- La mayoría de los museos y otros establecimientos culturales está cerrada los lunes y martes, por eso, antes de planificar tu visita, verifica su horario.
- En cafés y restaurantes se suele dejar una propina de 5 a 10% de la cuenta. Ojo que en algunos lugares, la propina puede estar incluida en la cuenta total.
- Si visitas alguna tienda con el letrero “Global Refund TAX FREE SHOPPING”, puedes pedir un cheque especial para que te devuelvan el impuesto.
- Está prohibido fumar en restaurantes, bares, locales nocturnos y cafés, aunque se permite en terrazas al aire libre o salas de fumadores (con ventilación adecuada).
