Conocida como la “Hija del Báltico”, Helsinki se encuentra en una península entre Estocolmo y San Petersburgo, rodeada de más de 300 islas y a un paso de Tallin, desde donde llegamos en el “ferry del placer”, luego de 2 horas y media de navegación. Claro, porque creo que no me equivoco al decir que éramos los más sobrios al momento de desembarcar en la capital de Finlandia.
Helsinki fue fundada en el año 1550 por el rey Gustavo Vasa de Suecia como un puesto comercial para competir con Tallin, que en aquel entonces era danesa. El crecimiento de la ciudad fue lento, hasta que en la mitad del siglo XVIII, se estableció la fortaleza marítima de Sveaborg (hoy en día, Suomenlinna) en frente de Helsinki.
En 1809, Finlandia fue anexionada por Rusia y la capital de Finlandia pasó de Turku a Helsinki en 1812. El Zar sintió que el Gran Ducado de Finlandia necesitaba una capital de grandes proporciones, por lo que ordenó la reconstrucción de Helsinki en un estilo imperial. Los encargados fueron los arquitectos Johan Albrecht Ehrenström, finlandés, y Carl Ludwig Engel, alemán. Por eso, a pesar de ser una capital nórdica, Helsinki refleja la influencia adquirida de sus ocupantes, las culturas occidental y oriental.
En fin, ya eran más de las 9 de la noche, cuando llegamos al puerto de la ciudad. Tras el lento desembarque de más de 2 mil personas del ferry y de buscar una máquina donde comprar los boletos con tarjeta de crédito, subimos a un tranvía con nuestras maletas cargadas, rumbo al centro de la ciudad. No sabíamos bien dónde debíamos bajar, así que luego de tres estaciones, miré entre las cabezas de la gente y decidí que ya era el momento. Nos abrimos paso con el equipaje y salimos del vagón. Por suerte, estábamos solo a un par de cuadras de nuestro alojamiento, el Forenom Aparthotel Helsinki City, unos departamentos de lo más económico que pude encontrar para dormir en la ciudad.
LOS 16 LUGARES QUE NO TE DEBES PERDER
ESTACIÓN CENTRAL DE HELSINKI
Después de dejar nuestras cosas y comunicarnos con Chile, salimos a caminar por el centro hasta llegar a la Estación Central, un edificio de estilo art nouveau de principios del siglo XX, elegido como una de las estaciones de tren más lindas del mundo por su arquitectura, y por la cual circulan a diario más de 200 mil personas.
Revestida de granito rosa, destacan su torre del reloj y dos pares de estatuas instaladas junto a la entrada principal, cada una de las cuales sostiene una lámpara esférica en sus manos. Resulta curioso que la estación fuera diseñada por el arquitecto Eliel Saarinen en 1909, cuando Finlandia aún pertenecía a Rusia, sin embargo, fuera inaugurada en 1919, dos años después de la independencia de Finlandia.
Al lado de la estación, la Plaza del Ferrocarril sirve principalmente como estación de bus secundaria, y está rodeada por el Teatro Nacional de Finlandia y el Museo Ateneum.
PARQUE ESPLANADI
La mañana del domingo amaneció perfectamente despejada, por lo que salimos muy temprano a aprovechar el día de sol. Así, llegamos al parque Esplanadi, probablemente el más famoso de Helsinki. Y es que el verde de sus árboles llama a pasar un momento agradable con la música de los artistas callejeros de fondo. Aunque debo destacar algo que me pareció impresentable para una ciudad que se dice de las con mejores índices de calidad de vida del mundo, y es que no se puede permitir tener unos horribles y enormes containers de basura en medio del parque. No, no y no.
Pues bien, la construcción del parque se inició en 1850 de la mano del arquitecto Carl Ludvig Engel, el mismo que se encargó de levantar la Catedral de Helsinki. Por aquel entonces aún existía la bahía de Kluuvi, que llegaba prácticamente hasta la ubicación actual del parque. Como se trataba de una zona húmeda, tuvieron que taparla con diferentes materiales. En la actualidad, en las calles aledañas al parque se encuentran tiendas de lujo como Louis Vuitton, Hugo Boss o Longchamp.
Al final del parque nos encontramos con la fuente de Havis Amanda, obra del escultor Ville Vallgren, construida en 1908 para simbolizar el renacimiento de Helsinki tras la ocupación rusa, la que se ha convertido en uno de los símbolos de la ciudad y en uno de sus monumentos más fotografiados.
PLAZA DEL MERCADO (KAUPPATORI)
Ya junto a la bahía está la Plaza del Mercado o Kauppatori, el punto donde se reúnen los habitantes de Helsinki, que acuden a comprar pescado fresco, y viajeros que llegan atraídos por este lugar tan peculiar para comer. La plaza está situada frente al mar y repleta de puestos en los que se puede encontrar desde carnes, dulces típicos, frutas y verduras, hasta gorros y bufandas de lana, artículos de piel de reno, artesanía y souvenirs típicos. Sin duda, un lugar para recorrer disfrutando de sus colores y olores.
A un costado de la plaza se halla el edificio que alberga el ayuntamiento de la ciudad desde 1913, aunque originalmente aquí estuvo situado el hotel Seurahuone. También destaca, en el centro de la plaza, un obelisco coronado por un águila de bronce de dos cabezas conocido como Keisarinnankivi (la piedra de la Zarina), que fue construido en 1935 tras la visita del Zar Nicolás II y la Zarina Alejandra.
MERCADO VIEJO (VANHA KAUPPAHALLI)
Finalmente, muy cerca de Kauppatori nos encontramos con un pequeño edificio de ladrillos rojos y amarillos en el que se encuentra el Vanha Kauppahalli, el viejo mercado cubierto de Helsinki, que se caracteriza por vender quesos, carnes, pescado, frutas, verduras, dulces y especias.
Pero también hay algunos locales donde tomar un café, chocolate caliente o una sopa tradicional. Y si quieres probar comprando alguno de sus productos frescos, puedes llevar salmón, paté o un kebab de reno. Una recomendación, no te olvides de probar el korvapuusti, unos sabrosos bollos de canela.
Los orígenes del Vanha Kauppahalli se remontan a 1888, ya que hasta entonces, la venta de alimentos se hacía al aire libre. Los vendedores empezaron a tomar consciencia de la necesidad de comerciar en un lugar más higiénico y organizar sus puestos, por lo que pusieron en marcha este proyecto, diseñado por Gustaf Nyström, el que un año más tarde ya estaba abierto al público.
Eteläranta / Tranvía: paradas Kauppatori (líneas 1A, 2 y 3) y Eteläranta (líneas 1A, 2 y 3)
Lunes a sábado: 8:00 a 18:00 horas
Entrada gratuita
https://vanhakauppahalli.fi/en/
TRANVÍA TURÍSTICO
Ya casi al mediodía, decidimos tomar el tranvía histórico, un carro de 1919 que sale cada 30 minutos desde la Plaza del Mercado y que en un viaje de 20 minutos recorre los barrios de Kruununhaka y Kaisaniemi, la Catedral y la Estación Central, además de la calle Aleksanterinkatu. Absolutamente recomendable.
CATEDRAL DE USPENSKI
De regreso en el puerto, recorrimos el distrito de Katajanokka hasta llegar a la Catedral de Uspenski, la catedral ortodoxa más grande de Europa Occidental. Construida en el siglo XIX, durante la dominación rusa, sus ladrillos rojos, su tejado verde y sus 13 cúpulas doradas que representan a Jesús con los discípulos, llaman poderosamente la atención, ya que combina influencias orientales y occidentales.
Mientras su fachada sigue la tradición eslava, la nave interior es un gran ejemplo de estilo bizantino. El iconostasio, una combinación de elementos clásicos y motivos decorativos ruso-bizantinos, fue pintado por el artista y académico ruso Pavel S. Šiltsov. No dejes de visitarla, la entrada es gratuita.
La Catedral de Uspenski fue consagrada el 25 de octubre de 1868. Según los deseos de Alejandro II, el Emperador de Rusia, la catedral fue consagrada a la Dormición de la Madre de Dios (uspenie).
Kanavakatu 1 / Tranvía: parada Tove Janssonin (líneas 4 y 5)
Martes a viernes: 9:30 a 16:00 horas / Sábado: 10:00 a 15:00 horas / Domingo: 12:00 a 15:00 horas / Lunes: cerrado / Cerrado durante ceremonias
Entrada gratuita
https://hos.fi/kirkot/uspenskin-katedraali/ (en finés)
Bajando la colina en la que se encuentra la catedral, llegamos a la avenida Pohjoisranta, donde paseamos contemplando los hermosos edificios y los yates anclados en la bahía. Más tarde, por la calle Snellmaninkatu nos encontramos con dos increíbles edificios: la Casa de los Estados y el Banco de Finlandia.
“La Casa de los Estados” construida entre 1888 y 1890, con estilo neo-renacentista, donde la influencia griega se observa en su frontis y en las columnas, tenía como finalidad servir como centro de reunión de los estamentos que no pertenecían a la nobleza.
Justo enfrente está el Banco de Finlandia, inaugurado en 1812, es el banco central de Finlandia y se jacta de ser el cuarto más antiguo del mundo, tras los de Inglaterra, España y Francia.
PLAZA DEL SENADO (SENAATINTORI)
Andando una cuadra más por la misma calle, se llega a la Plaza del Senado o Senaatintori, el punto más importante de la ciudad, desde donde se articulan las principales calles y monumentos. Fue diseñada por el arquitecto Carl Ludvig Engel en estilo neoclásico y construida entre 1822 y 1852. En torno a ella se encuentran la Catedral de Helsinki, el Palacio de Gobierno, la Universidad de Helsinki y la Biblioteca Nacional. En la esquina sudeste destaca la casa Sederholm, el edificio de piedra más antiguo de la ciudad, construido en 1757, en estilo rococó.
En el centro de la explanada destaca la estatua del emperador Alejandro II, la que fue realizada en el año 1894 y que muestra su figura rodeada de representantes de la ley, la cultura y el campesinado.
Sabías que cada día, a las 17:49 horas, en la plaza se puede escuchar una canción llamada Sound of the Senate Square, en la que se escucha música de carillón, yendo de un edificio a otro. Dicen que la mejor posición para escucharla es cerca de la estatua de Alejandro II.
CATEDRAL DE HELSINKI
Sin embargo, no puedo hablarles de la plaza sin contarles del que es el principal monumento de Helsinki: la Catedral Luterana o “Catedral Blanca”, emplazada sobre unas largas escalinatas al norte de la Senaatintori, lo que hace posible verla desde muchos lugares de la ciudad.
La Catedral fue construida entre 1830 y 1852 en estilo neoclásico, teniendo como inspiración la Catedral de San Isaac de San Petersburgo. Inicialmente se la bautizó como la iglesia de San Nicolás, en homenaje al zar ruso Nicolás I, pero tras la marcha de los rusos de Finlandia, pasó a ser conocida como la Gran Iglesia, y ya a mediados del siglo XX se convirtió en la Catedral de Helsinki.
Lo más interesante de la Catedral es la llamativa sencillez de su interior, casi sin decoración, siguiendo la tradición luterana de no venerar imágenes. Las únicas representaciones humanas son las estatuas de Martín Lutero y Mikael Agrícola (el “padre” del idioma finlandés escrito y reformista de la Iglesia de Finlandia al luteranismo). A la derecha del púlpito y tras el altar, un gran cuadro de Jesús tras ser bajado de la Cruz, es la única imagen religiosa.
Unionsgatan 29 / Metro: estación Helsingin yliopisto / Tranvía: parada Hallituskatu (líneas 1A y 7A)
Lunes a domingo: 9:00 a 18:00 horas / Junio a agosto: lunes a domingo: 9:00 a 00:00 horas / Cerrado durante los servicios y otros eventos
Entrada gratuita
https://www.helsinginseurakunnat.fi/en/index.html.stx
CRUCERO TURÍSTICO POR EL ARCHIPIÉLAGO
Después de almorzar en un Burger King de la calle Aleksanterinkatu, una de las avenidas más comerciales de la ciudad, regresamos al puerto para tomar un tour por las islas del archipiélago de Helsinki.
El crucero de una hora y media de duración recorre varias de las islas que componen la capital finlandesa, como la isla de Korkeasaari, sede del zoológico, además de las islas de Kulosaari y Vartiosaari.
Navega por el archipiélago de Helsinki y descubre de una manera diferente la ciudad desde el agua.
SUOMENLINNA
También se navega frente a la fortaleza marítima de Suomenlinna, construida en 1748 sobre seis islas para tratar de evitar el avance marítimo de la Rusia imperial, pero que sin embargo, en 1808, se rindió al ejército ruso, quienes la ocuparon durante más de 100 años, hasta que Finlandia se declaró independiente a finales de 1917.
Desde una de las islas, Kustaanmiekka, se puede disfrutar de unas increíbles vistas al mar y a los baluartes originales, así como la línea de defensa marítima con sus muros de arena y cañones.
En la actualidad, la fortaleza de Suomenlinna es Patrimonio de la Humanidad desde 1991 y uno de los lugares más populares de Finlandia, ya que ofrecen la posibilidad de realizar distintos tipos de actividades, como pasear, disfrutar de un día de campo o salir a correr.
Sabías que Suomenlinna no es solamente uno de los principales atractivos de Finlandia, sino también un hogar lleno de vitalidad para 800 residentes.
Lunes a domingo: 10:00 a 18:00 horas
Entrada gratuita
https://www.suomenlinna.fi/es/
No obstante todo lo anterior, tengo que decirles que este tour fue una gran decepción (más aún considerando su precio). Contrario a lo que me imaginaba, el barquito navega entre islas casi deshabitadas, todas muy similares, lo que hace que el paseo pierda su atractivo, a diferencia de lo que sucede, por ejemplo, con un crucero por las islas de Estocolmo, que están completamente urbanizadas y ofrecen paisajes diferentes e interesantes a la cámara. Además, el frío en cubierta era insoportable y tras la hora y media, lo único que deseaba era volver al puerto. Lo único destacable fueron las hermosas panorámicas de la ciudad que pude tomar desde la bahía.
HELSINKI ART MUSEUM (HAM)
El lunes nuevamente nos sorprendió el Sol, por lo que esta vez, recorrimos la parte norte de la ciudad. Así, caminamos por la calle Fredrikinkatu en dirección al Helsinki Art Museum (HAM), que funciona en lo que antiguamente fueron unas canchas de tenis cubiertas.
El museo cuenta con una colección que incluye más de 9000 obras de arte y casi la mitad de estas piezas se exhiben en parques, calles, oficinas, centros de salud, escuelas y bibliotecas.
Eteläinen Rautatiekatu 8 / Metro: estación Kamppi (líneas M1 y M2)
Martes a domingo: 11:00 a 19:00 horas / Lunes: cerrado
Entrada: 12€ / Menores de 18 años: gratis / Entrada gratuita a parte del museo
https://www.hamhelsinki.fi/es//
Siguiendo hacia el norte, llegamos hasta el edificio del Parlamento, terminado en 1931 en estilo neoclásico de la década de 1920 con algunos toques de modernismo. En su exterior resaltan el color rojizo del granito rojo, la alta y ancha escalinata, y las catorce columnas de estilo corintio.
IGLESIA DE PIEDRA (TEMPPELIAUKIO)
Desviándonos hacia el poniente unas cuadras por el distrito de Töölö, nos encontramos con la famosa iglesia de Temppeliaukio o “Iglesia de Piedra”. Inaugurada en 1969, destaca por su espectacular interior: fue excavada directamente en la roca, lo que puede apreciarse en sus paredes con piedra que no ha sido pulida, lo que crea un efecto con imperfecciones que la hace especialmente particular. La iluminación, en tanto, proviene directamente del sol, ya que la luz natural penetra en la iglesia por los 180 cristales que hay en su techo.
De planta circular y techo de cobre, goza de una excelente acústica, por lo que habitualmente se ofrece un amplio programa de conciertos.
Lutherinkatu 3 / Tranvía: parada Sammonkatu (línea 2) / Autobuses: parada Kauppakorkeakoulut (líneas 14, 18, 37, 39, 41, 42, 69, 70, 194 y 195)
Enero a marzo y noviembre a diciembre: lunes a sábado: 10:00 a 17:00 horas / Domingo: 12:00 a 17:00 horas / Abril y octubre: lunes a sábado: 10:00 a 18:00 horas / Domingo: 12:00 a 17:00 horas / Mayo y septiembre: lunes a sábado: 9:30 a 19:00 horas / Domingo: 12:00 a 17:00 horas / Junio a agosto: lunes a sábado: 9:30 a 20:00 horas / Domingo: 12:00 a 17:00 horas
Adultos: 4€ / Menores de 18 años: entrada gratuita
https://temppeliaukionkirkko.fi/en/index.html
MUSEO NACIONAL DE FINLANDIA
Nuevamente en la avenida Mannerheimintie, fuimos al Museo Nacional de Finlandia, abierto al público en 1916 y que ofrece un viaje por la historia de Finlandia desde la época antigua hasta el siglo XIX.
Mannerheimintie 30 / Tranvía: parada Kansallismuseo (líneas 4, 7 y 10)
Septiembre a abril: Martes a domingo: 11:00 a 18:00 horas (miércoles hasta las 20:00 horas) / Mayo a agosto: Lunes a domingo: 11:00 a 18:00 horas (miércoles hasta las 20:00 horas)
Adultos: 14€ / Estudiantes y mayores de 65 años: 10€ / Menores de 18 años: entrada gratuita
https://www.kansallismuseo.fi/en/kansallismuseo/frontpage
HESPERIAPARKEN
Un poco más allá, cruzando la avenida hacia el oriente, llegamos al Hesperia Park, un área verde de 8 hectáreas construida junto a la bahía de Töölönlahti, en un sitio donde antes hubo fábricas. En su interior está la Ópera Nacional, ubicada en un edificio inaugurado en 1993 y que cuenta con dos auditorios, el principal con 1350 asientos y uno más pequeño, con entre 300 y 500 asientos.
En este parque también se encuentra el Jardín de Invierno, abierto en 1893 y que ofrece más de 200 tipos de especies, entre las que destacan las orquídeas, los tulipanes, los cactus y el jardín de rosas.
ESTADIO OLÍMPICO
Luego caminamos hasta el Estadio Olímpico, sede de los Juegos Olímpicos de 1952. Su construcción comenzó en 1934 para ser inaugurado en 1938. Lamentablemente, el estadio estaba en remodelación, por lo que no pudimos subir a la torre desde donde se tienen de las mejores panorámicas de Helsinki, y solamente tuvimos que conformarnos con tomarle fotos desde afuera. No nos fue mejor con la piscina olímpica, que también estaba cerrada.
Sabías que la característica torre tiene una altura de 72.71 metros, la misma distancia a la que Matti Järvinen, el finlandés ganador de la medalla de oro de los juegos de Los Ángeles 1932, lanzó su jabalina.
LINNANMÄKI
Pasado el mediodía, cruzamos la línea del tren para ir a Linnanmäki, el parque de atracciones de la ciudad. Por 39 euros, compré la pulsera que te permite subir a todos los juegos… ¡con lo que me gustan!.
Así que vuelto loco como un niño, comencé a probar todas las atracciones del parque, como las montañas rusas Kirnu, Salama, Ukko y Vuoristorata, que está construida en madera, como las antiguas. También me atreví con Kieputin, Kingi, Magia y Raketti. Pero sin duda, el que me dejó más mareado es Kehrä, una rueda con carritos que comienzan a elevarse girando muy rápidamente.
La gracia del parque es que si no quieres comprar la pulsera que te da acceso a todos los juegos, puedes pagar individualmente por subir a cada atracción. Hay restoranes donde comer o beber algo y también algunas atracciones gratuitas, como Panoraama, una torre mirador giratoria de 53 metros de altura, que ofrece hermosas vistas de la ciudad. En los videos pueden ver la entretenida tarde que pasé ahí.
Tivolikuja 1 / Tranvía: parada Linnanmäki (línea 3) / Autobuses: parada Linnanmäki / Borgbacken (línea 23)
Horarios: https://www.linnanmaki.fi/en/info-about-the-park/opening-hours/
Pulsera con acceso a todas las atracciones: 42€
https://www.linnanmaki.fi/en/
MONUMENTO A SIBELIUS
Para terminar la tarde, fuimos al Monumento a Sibelius, erigido en 1967 y que conmemora la figura del compositor finlandés Jean Sibelius, genio de la música sinfónica de siglo XX. Se encuentra en el barrio de Toolo, en un bosque a orillas del mar que conforma el también conocido parque de Sibelius.
Realizado por la artista finlandesa Eila Hiltunen, el monumento parece estar inspirado en un órgano, pues se compone de más de 600 tubos de acero huecos, lo que permite recorrerla por dentro y crear sonidos y ecos en sus cavidades. Sin embargo, la artista quería representar un bosque de abedules, considerado como árbol nacional de Finlandia.
Sabías que Jean Sibelius fue el autor de la música del himno de Finlandia.
Antes de regresar al hotel, pasamos por un supermercado a comprar algunas cosas para el desayuno, que por cierto, nos salieron más baratas que en cualquier ciudad de Europa e incluso que en Chile. Al día siguiente, nos levantamos temprano y caminamos hasta la estación para tomar nuestro tren a San Petersburgo.
Para el resumen, tengo que decir que la capital de Finlandia es una ciudad que se puede explorar fácilmente a pie. El diseño, su arquitectura y su cultura son todas estupendas maneras de explorarla. Mientras que sus grandes parques, bosques, lagos y su línea costera con sus islas garantizan una exquisita convivencia con la naturaleza.
MAPA
CLIMA
Helsinki tiene un clima de transición entre el clima marítimo y el continental. Los veranos son cálidos, con temperaturas promedio en julio de entre 12 y 22ºC, los días son largos (19 horas de sol en junio y julio) y soleados. Desde finales de septiembre, el clima empieza a enfriarse y los días se hacen más cortos. Los inviernos son duros y nevados, con temperaturas promedio en febrero de entre -9 y -3ºC.
Por eso, la mejor época para viajar a Finlandia son los meses que van de mayo a septiembre, cuando los días son más cálidos, largos y brillantes.
Ahora bien, si lo tuyo son los paisajes cubiertos de nieve y el frío extremo, los meses de invierno pueden resultar “mágicos”, sin embargo, personalmente no aconsejo los meses de temperaturas más severas.
¿CUÁNTOS DÍAS ESTAR?
Como se trata de una ciudad compacta, que fácilmente se puede recorrer a pie, creo que dos días son más que suficientes para conocer los atractivos más importantes de Helsinki.
Dedica el primer día a recorrer el centro con la Plaza del Senado, la Catedral Luterana y la Catedral Uspenski, Esplanadi, la Plaza del Mercado y el Puerto. Puedes terminar la jornada con el tour por las islas, que aunque a mí no me gustó, puede ser entretenido para ti. Otra opción es aventurarte por las islas de la fortaleza de Suomenlinna.
El segundo día puedes animarte a andar por la parte norte de la ciudad y visitar la Estación Central, la “Iglesia de Piedra”, el Museo Nacional, el Hesperia Park y el Estadio Olímpico, y el monumento a Sibelius. Para finalizar el día, una buena alternativa es el parque de diversiones Linnanmäki.
ALOJAMIENTO
El alojamiento en Helsinki no es especialmente barato si se compara con otras ciudades europeas. Por eso, una buena forma de ahorrar es alojarte en un apartamento, como en el que yo me quedé: Forenom Aparthotel, que tiene varias ubicaciones en la ciudad.
Centro: La capital de Finlandia no es una ciudad demasiado grande y la mayoría de sus atractivos están en el centro o bastante cerca, así que alojando en esta zona, podrás visitar la Catedral, la Plaza del Mercado y varios museos. Además, estarás cerca del puerto para tomar el ferry a Suomenlinna.
Kluuvi: El barrio cerca de la estación es una de las mejores opciones para alojar, ya que es una de las zonas mejor comunicadas de la ciudad, incluyendo el tren al aeropuerto. Los alojamientos son algo más económicos que en el centro y hay varios atractivos como el museo Kiasma o la Biblioteca Central Oodi.
Kamppi: Ubicada al oeste del centro de Helsinki, es una de las zonas más interesantes y de moda, ya que tiene un montón de atractivos, con una gran cantidad de tiendas, restoranes y bares. En esta zona puedes visitar la famosa Capilla del Silencio, la Iglesia de Piedra y varios museos.
Kallio: Es la zona más económica donde dormir en Helsinki y se encuentra al noreste de la ciudad. Históricamente ha sido un barrio de clase obrera, pero en los últimos años, la llegada de jóvenes estudiantes lo ha revitalizado y lo ha convertido en otro atractivo más. La oferta hotelera no es muy grande, pero hay hoteles bastante más económicos que en el centro, y lo mejor es que solo estarás a 15 minutos del corazón de la ciudad.
TRANSPORTE
En Helsinki, la red de transporte público es administrada por la empresa HSL (Transporte Regional de Helsinki), que agrupa tranvía, autobús, metro y hasta ferry, y ofrece un útil planificador de rutas: https://www.reittiopas.fi/en/
METRO
El metro funciona de 6 de la mañana a 12 de la noche y el billete sencillo cuesta 2€ aproximadamente. Es el método de transporte más rápido de la capital y tiene dos líneas en dos direcciones: este y oeste.
TRANVÍA
El tranvía es la forma más común de desplazarse por el centro de la ciudad. Sus 13 líneas conectan todas las zonas principales de Helsinki. Los tranvías circulan de 05:45 a 00:00 horas. Los billetes cuestan alrededor de 1,80€ a bordo y un poco menos si los compras por adelantado.
TRENES
Los trenes de cercanías están gestionados por la empresa VR y funcionan de 5:00 a 1:30 horas y son muy funcionales para desplazarse hasta el aeropuerto o visitar las zonas más próximas de Helsinki. Estos trenes también conectan la capital de Finlandia con el resto de ciudades del país a través de los trenes de larga distancia.
FERRY
El ferry que une Helsinki con la isla de Soumenlinna forma parte del transporte público de la ciudad, lo que significa que se pueden utilizar los billetes de transporte común. Es importante que tengas en cuenta que para comprar el billete, debes hacerlo en las máquinas que hay en el puerto, en los ferries no aceptan efectivo. Los barcos salen justo enfrente de la Plaza del Mercado (Kauppatori) todos los días del año y tardan unos 15 minutos en completar el trayecto.
AUTOBUSES
Helsinki cuenta con una amplia red de líneas de autobuses por toda la ciudad, en total unas 120. Los buses circulan desde primera hora de la mañana hasta medianoche. Un billete sencillo cuesta alrededor de los 2€.
BICICLETA
Si te atreves con el frío, la bicicleta es otra buena forma de moverse por Helsinki, ya que dispone de unos 750 kilómetros de ciclovías. Desde junio hasta finales de agosto, hay bicicletas municipales (City Bikes) disponibles en puestos por toda la ciudad, previo pago de 2€, que se devuelven tras la entrega de la bicicleta.
CAMINAR
Como ya les he señalado, Helsinki es una ciudad bastante compacta, por lo que se puede recorrer a pie fácilmente, sobre todo, si la visitas en los meses más cálidos.
CONSEJOS
- Lleva ropa abrigada, ya que nunca hace mucho calor, excepto en pleno verano.
- No respetar las reglas de conducta está muy mal visto en los países nórdicos. Por ejemplo, cruza únicamente cuando el semáforo está en verde y en los pasos de peatones.
- En los restoranes no se acostumbra a dejar propina, pues ya está incluida en la cuenta. Sin embargo, a los porteros de los hoteles y restoranes se suele dejar una pequeña propina.
- En los establecimientos públicos está prohibido fumar, por lo que si fumas, asegúrate de informarlo antes de reservar una habitación en el hotel.
- Los finlandeses cuidan mucho su medio ambiente, por eso procura cuidar la naturaleza, ya que de lo contrario, podrías recibir una multa.
- Los finlandeses son reservados, por lo que no debes presionarles y siempre ser amable con ellos. Sin embargo, si necesitas ayuda siempre te la brindarán con la mejor de sus sonrisas.
- No te olvides andar siempre con tu pasaporte. Para entrar a las discotecas y algunos locales te piden documentos, algunas veces son sólo para mayores de 22 años.
